La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Indira Alfonzo, dijo a periodistas estar «complacida» por la movilización de ciudadanos hacia los 381 centros de votación dispuestos en todo el país, un hecho que fue transmitido durante todo el día por el canal estatal VTV, con un incesante llamado a participar.
«Hemos cumplido con todas las condiciones logísticas para este fin, estamos muy complacidos por cómo el pueblo ha participado en este proceso», expresó Alfonzo tras asegurar que se tomaron «todas las medidas biosanitarias» para evitar los contagios por el coronavirus SARS-CoV-2 en esta jornada, como esperan hacer el día de los comicios.
Este segundo intento, según Alfonzo, fue «exigido por los electores» luego de un primer ensayo que se celebró en octubre y en el que se logró una «participación histórica», aunque las autoridades electorales nunca han precisado el número de votos registrado en estos procesos.
El simulacro, para el que se dispusieron 900 mesas de votación, comenzó a las 12.00 GMT y tuvo una duración oficial de siete horas, aunque, luego de cumplirse el lapso previsto, el CNE autorizó agregar dos horas a la jornada o incluso más en aquellos lugares en los que haya electores a la espera.
La actividad no contó con la participación del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, quien sí llamó a acudir a los centros para familiarizarse con esta contienda, en la que cerca de 14.400 aspirantes se disputarán 277 escaños.
El gobernante partido PSUV siguió de cerca la jornada para afinar la maquinaria con la que esperan movilizar a los votantes el 6 de diciembre y recuperar el control de la Asamblea, según una nota de prensa de la formación oficialista.
Un reciente estudio de la encuestadora Datanálisis, al que tuvo acceso Efe, estima que la intención de participar en las legislativas es tan baja que bien podría traducirse en un 70 % de abstención.