La Universidad de Carabobo tiene dos años sin recibir dinero para gastos de funcionamiento, por eso las instalaciones se siguen deteriorando progresivamente y los ciudadanos lo pueden notar.
El vicerrector administrativo de nuestra máxima casa de estudios, José Angel Ferreira, aseguró que por falta de recursos, que debe enviar el gobierno nacional, no se ha podido cortar la maleza de la ciudad universitaria, no se puede impermeabilizar en las áreas que se requiere, ni se puede solventar problemas que se han presentado con el cableado eléctrico, entre otras cosas.
En declaraciones al programa Desde La Cabina, de Unión Radio, Ferreira subrayó que no basta con decir que se va a comenzar clases presenciales en octubre, sino que se debe determinar qué se va a hacer con las instalaciones que tienen un deterioro de dos años, por falta de mantenimiento.
Subrayó que a esto se debe agregar los continuos robos y hurtos que se vienen cometiendo, sobre todo en la zona dos de la universidad, comprendida por las facultades de Ciencias de la Salud y Odontología, que es el área colindante a zonas populares, que está complemente oscura en horas de la noche.
Ferreira apuntó que para retomar las clases presenciales, no solo se requiere de un plan de vacunación efectivo contra la COVID-19, sino también realizar inversiones que permitan recuperar al menos la mayoría de las actividades del campus para poder arrancar nuevamente.
