Felícita Blanco
Elizabeth Margarita Aguilera Vegas (44), jefa de la Unidad de Batalla
Bolívar-Chávez (UBCH) de la
Escuela Sucre en la
Cota 905, fue asesinada de varios disparos en el rostro y su
cuerpo fue quemado en el barrio San Miguel, parroquia Santa Rosalía de Caracas.
Aguilera fue sorprendida por unos delincuentes en una vereda cuando se
dirigía a su residencia el lunes a las 9:30 de la noche. Sus victimarios no
permitieron que nadie le prestara auxilio, disparaban indiscriminadamente,
inclusive contra la fachada de las casas.
A través de las redes sociales daban cuenta de lo ocurrido, inclusive
circulaba la fotografía del cuerpo en llamas. El cadáver permaneció más de 12
horas en la vía pública, y fue a las 10:30 de la mañana de ayer, cuando
acudieron funcionarios del Eje Central de Homicidios del Cuerpo de
Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), para hacer el
levantamiento del cuerpo, en medio de un operativo de seguridad implementado
por efectivos de la
Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Los vecinos guardaron silencio, nadie se atrevía a hacer comentarios. Unas
versiones indicaban que había sido sicariato, pero cobraba mayor fuerza el
móvil de la venganza. Supuestamente ajusticiaron a Elizabeth por haber
informado a la policía sobre la ubicación de un delincuente que estaba
enconchado en la parte alta del barrio.
Es la segunda mujer ultimada en la
Cota 905 por esta causa. El 17 de septiembre de 2015 mataron
a tiros a Maritza del Carmen Reyes (54), en la parte alta de Las Brisas de El
Paraíso. Reyes era encargada de la Misión Barrio Tricolor y miembro del consejo
comunal. También la acusaban de ser informante de la policía.
