Reuters
Unos 200 mil católicos cruzarían el próximo miércoles
los 4 puentes en la localidad estadounidense de El Paso hacia Ciudad Juárez, en
México, para ver al Papa Francisco en un masivo peregrinaje.
La visita a la norteña ciudad mexicana ha tenido una alta adhesión en la
vecina El Paso, donde distritos escolares, oficinas
del gobierno y empresas planean cerrar ante lo que muchos consideran como una
única posibilidad de ver al líder de la Iglesia Católica.
El Paso tiene una extensa población hispana y
católica. Según estimaciones locales, entre 150 mil y 200 mil personas
cruzarían la frontera.
Habrá agentes fronterizos adicionales para evitar que individuos o
grupos aprovechen la visita papal como una distracción para eludir los
controles, dijo Ruben Jauregui, agente de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
El papa viajará a Ciudad Juárez, una de las más violentas del país, en
su última parada de un viaje de 5 días por México, donde rezará por los inmigrantes y víctimas de la violencia en una
misa a pocos metros de la frontera.
Se construyó una plataforma que le
permitirá al pontífice dirigirse a los habitantes que estén viendo el acto
desde El Paso. La diócesis católica de
la ciudad dijo que entregó unas 10 mil entradas gratis para la misa.
En algunos sitios de internet, los
boletos se vendían a más de 150 dólares.