El exfiscal del Seniat Carlos
Lugo Gil fue condenado a 2 años y 8 meses de prisión luego de admitir que
solicitó 500 mil bolívares a un comerciante para evitar el cierre de su
panadería, ubicada en Catia, Caracas.
De acuerdo con la investigación,
el 18 de noviembre de 2015, Gil realizó una inspección en el establecimiento y
pidió la cantidad de dinero al gerente a cambio de omitir el procedimiento
administrativo correspondiente, una multa y el cierre del local comercial.
Tras aceptar los hechos, el
fiscal 2º de la jurisdicción, Lenin Del Guidice, ratificó la acusación contra
el hombre de 46 años de edad por el delito de concusión, previsolosto y sancionado
en la Ley contra la Corrupción.
Con información de elclarinweb.