Un error defensivo del Manchester United, que aprovechó Demba Ba, desencadenó la derrota de los 'Diablos Rojos' contra un Istanbul Basaksehir que se agarra a sus opciones en la Liga de Campeones (2-1).
El proyecto de Ole Gunnar Solskjaer vuelve a ponerse en duda, tras encadenar dos derrotas consecutivas, después de caer este fin de semana ante el Arsenal en la Premier League.
Si el Manchester United necesitaba este partido para despejar dudas, lo primero que hizo fue meterse en un nubarrón. A los 13 minutos, dispuso de un córner a favor. Subió todo el mundo al remate, sin dejar a nadie defendiendo a Demba Ba, que campaba a sus anchas en el medio del campo sin que nadie detectara su presencia.
El United acabó perdiendo la pelota y el equipo turco lanzó un pelotazo a Ba, que arrancó desde su campo, recordando momentáneamente el gol que le marcó al Liverpool en 2014 y que terminó con su carrera por el título.
El senegalés, perseguido por Matic, que fue el único que se dio cuenta del desbarajuste, se plantó delante de Henderson y le batió por bajo.
Los de Solskjaer se desmoronaron en la zaga y otra contra les puso 2-0 abajo. Juan Mata perdió la pelota en el medio tras un mal pase de Bruno Fernandes y Deniz Turuc la condujo hasta la frontal, puso un pase horizontal, Ba lo dejó pasar y Visca fusiló a Henderson.
Con el United en la lona, los 'Diablos Rojos' lanzaron un puñetazo casi a ciegas y acertaron, agarrándose al partido cuando parecía sentenciado. A dos minutos del descanso, Shaw apareció por la banda izquierda, colocó un centro templado y Martial se elevó libre de marca para enmarcar la pelota junto a un palo.
La anotación le sirvió al United para no marcharse muerto al vestuario, pero no acabó de imprimir la velocidad que se esperaba tras el descanso.
El ritmo lento y la falta de clarividencia arriba perjudicaba a los de Solskjaer, incapaces de penetrar el muro de defensas del Basaksehir, que no necesitaba nada para sentirse cómodo.
Como se está convirtiendo ya en costumbre en Solskjaer, recurrió a la épica para nivelar la falta de fútbol. Quitó a Tuanzebe para meter a Scott McTominay, y sentó a Van de Beek para dar entrada a Edinson Cavani.
Pero ni con esas. El United no pudo volcarse contra la portería turca y apenas inquietó al portero del Basaksehir hasta el minuto 93, cuando en un córner, una serie de carambolas terminaron con un defensa sacando la pelota en la línea de gol.
Sin más apuros, los de Estambul aguantaron los tres puntos, los primeros que suman este año y se encaminan a la lucha por el pase a octavos de final. El United sigue liderando el Grupo H, con seis puntos, tres más que el Paris Saint Germain y el RB Leipzig, que aún tienen que jugar, y el propio Basaksehir.