El Parlamento Europeo solicitó este martes la prohibición de la pesca eléctrica en la Unión Europea (UE), oponiéndose a una derogación propuesta por la Comisión que quiere autorizar esta práctica a mayor escala en el mar del Norte, donde es permitida con carácter experimental.
La votación es una etapa en el largo recorrido legislativo del texto en el seno de la UE. El Parlamento ahora negociará con el Consejo (los Estados miembros) y la Comisión para obtener un compromiso final.
«Es una muy buena victoria contra una pesca terriblemente nefasta, una verdadera arma de predación masiva», se congratuló en un comunicado Yannick Jadot (Verdes franceses), quien se encuentra entre los eurodiputados más comprometidos en contra de esta práctica.
La Comisión proponía suprimir la restricción impuesta a las flotas de los Estados miembros, establecida a título de experimentación.
Ésta se había establecido a título experimental, limitando a 5% los pesqueros autorizados a equiparse con este tipo de tecnología.
El ejecutivo europeo, en cambio, aspira a mantener la zona geográfica en la cual este tipo de pesca está limitada, al sur del mar del Norte.
En un manifiesto, la semana pasada, 200 chefs de cocina europeos rechazaron esta práctica. La pesca eléctrica conlleva capturas «de una calidad deplorable», con animales «estresados y a menudo marcados con hematomas».
Además, este método es «no selectivo y amaga con poner en peligro todos los organismos que viven en el fondo del océano», afirmaban.
Esta práctica está basada en enviar descargas eléctricas al fondo del mar.
