El presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, en un artículo publicado en el diario El Nuevo País, denunció que el Gobierno nacional abusa “de la palabra injerencionismo para evadir el cumplimiento de los compromisos que, en el más reciente de los casos, contrajo con el Vaticano en la mesa de diálogo”.
Aseguró que el Ejecutivo utiliza esta palabra para calificar “toda opinión o actitud que se produzca en el ámbito internacional, incluso en los organismos de los que Venezuela forma parte, que no se acoplen a los deseos del régimen fallido en nuestro país”.
Según Ramos Allup la crisis que atraviesa el país se debe a la composición del cuerpo diplomático venezolano. “Creo que ni el país más atrasado del mundo ostenta el inigualable récord de este régimen de contar con un servicio exterior integrado algo así como en un 90% por personal no diplomático, comparsa heteroclítica de militares retirados, paseantes ávidos del turismo que nunca hicieron, familiares estorbosos, parentela indeseable, ignaros que van a hacer cursos de cualquier cosa, ociosos en busca de ocupación tardía y pare de contar”, sugirió.