El presidente Nicolás Maduro acusó este sábado al mandatario argentino, Mauricio Macri, de tener una obsesión fatal con su país y de convertirse en la punta de lanza de una agresión internacional contra su Gobierno.
En una entrevista con la argentina Radio Rebelde, Maduro dijo que el mandatario no solo destruye a su pueblo y agrede a la clase obrera, sino que, además, es la punta de lanza de la destrucción de la unión que hemos logrado en América Latina y el Caribe.
En ese sentido, consideró que Macri se ha alzado también como un estandarte de la búsqueda de un bloqueo económico, financiero comercial, y político contra Venezuela, como el que se le hizo a Cuba.
Asimismo, se refirió al hecho de que el Gobierno argentino anunciara esta semana que le retirará la Orden del Libertador San Martín con la que la expresidenta Cristina Fernández (2007-2015) condecoró a Maduro en 2013.
«Los estoy esperando. Me la dio el pueblo argentino y no me la dio a mí, se la dio al pueblo de Venezuela (…), le pertenece al pueblo y va a quedar ridículo», criticó.
«La obsesión fatal que tiene el señor Macri con Venezuela no es normal. Ojalá tuviera esa obsesión para generar empleo en Argentina, para atender a los pensionados, para mejorar la salud, para recorrer los barrios», aseveró.
El mandatario también puso el acento sobre la situación de la activista social y diputada del Parlamento del Mercado Común del Sur (Mercoosur) Milagro Sala, en prisión preventiva en la norteña provincia argentina de Jujuy desde enero de 2016 y ante cuya detención ya se han pronunciado en contra numerosos organismos internacionales.
En una breve conexión telefónica con Sala durante la entrevista, ambos se transmitieron su «solidaridad» y «fuerza» por las coyunturas que atraviesan y Maduro deseó que se termine pronto el «bochorno internacional» que atraviesa el país austral por este caso.
«Nos vamos a dar pronto un abrazo de victoria, Milagro. Resiste, que llevamos en nuestra alma el espíritu rebelde de los libertadores», agregó.