Con información de Comstat Rowland
La osteoporosis es una enfermedad
sistémica del esqueleto, que se caracteriza por disminución de la masa ósea, lo
cual incrementa el riesgo de fracturas. La jefa del Servicio de Endocrinología
y Metabolismo del Hospital Universitario de Caracas, Liliana Fung, explica que
la enfermedad es más común en las mujeres después de la menopausia y está relacionada con factores genéticos, hormonales y
nutricionales.
Entre los aspectos genéticos y
hormonales que predisponen a la pérdida de densidad ósea la especialista en
endocrinología destaca: envejecimiento, antecedentes familiares de
osteoporosis, menopausia precoz, natural o quirúrgica y múltiples enfermedades
principalmente endocrinas y reumatológicas.
Además menciona factores
modificables como: bajo peso corporal, sedentarismo, tabaquismo, consumo
excesivo de alcohol o cafeína, baja ingesta de calcio, así como el déficit de
vitamina D. Una causa frecuente de osteoporosis es el uso de medicamentos como
glucocorticoides, hormona tiroidea, anticonvulsivantes o fármacos que producen
disminución de las hormonas sexuales.
Tratamiento avanzado para la comodidad del paciente
Existen medicamentos llamados bifosfonatos
que inhiben la actividad destructiva exagerada de las células que remodelan los
huesos, conocidas como osteoclastos. Dichos fármacos para el tratamiento de la
osteoporosis están disponibles en una amplia variedad de presentaciones que
permite administrarlos por vía oral o intravenosa.
El tratamiento que le brinda más
autonomía y adherencia al paciente, por su dosificación anual, es el ácido
zoledrónico, un medicamento que enlentece la degradación de los huesos y
aumenta la densidad de los mismos, disminuyendo así el riesgo de fracturas. El
mismo lo pueden adquirir los pacientes en el Seguro Social.
La galena explica que el ácido
zoledrónico es una solución (líquido) que se inyecta en la vena una vez al año,
cuyo principio activo se une al hueso con gran afinidad y tiene una potente
acción inhibidora sobre la actividad de las células que degradan el hueso. Su
aplicación es de tipo ambulatoria y debe estar a cargo de personal médico
entrenado, para informar adecuadamente a los pacientes sobre las medidas a
seguir antes, durante y después de recibir el tratamiento.
Estilo de vida saludable
La doctora Fung enfatiza que el
tratamiento farmacológico debe estar acompañado de un estilo de vida activo y
saludable, que incluya actividad física regular y una alimentación adecuada
para el máximo aprovechamiento del calcio y otros nutrientes que ayudan a
fortalecer la estructura ósea.
En cuanto al aspecto nutricional
destacó la importancia de la vitamina D para absorber mejor el calcio; asimismo
alertó que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas o con cafeína y el hábito
tabáquico aumentan el riesgo de padecer osteoporosis, también se debe evitar el
consumo de sal en exceso ya que aumenta la pérdida de calcio por la orina. Por
lo que invitó a las personas a cuidarse desde la juventud para estar más sanos
en la adultez.
