Estupor, indignación, impotencia, o todo al mismo tiempo, fue lo que se percibió en las redes sociales de este lunes cuando Nicolás Maduro junto con se esposa Cilia Flores aparecieron en un vídeo como excéntricos millonarios en Estambul, Turquía, en el famoso restaurante, dicen que de los más costosos y afamados del mundo, Salt Bae, junto la célebre chef, Nusret Gökkce.

Ese boato, puro en mano, proviniendo de un presidente que se hace llamar el “presidente obrero” es doblemente ofensivo, que desdice, por una parte, de su esnobismo y en segundo lugar por inoportuno. Un acto grotesco como el mundo entero conoce, Venezuela el país donde él manda está atravesando una de las peores crisis de su historia solo comparable a los primeros años del siglo XIX cuando la guerra de independencia. La diáspora del pueblo caraqueño de entonces hacia el oriente del país ante el ataque de Caracas por parte de las fuerzas de José Tomás Boves, plasmado para la historia por el pincel de Tito Salas. Del mismo modo como hoy día lo hacen millones de compatriotas que migran hacia diferentes países del planeta acosados por un régimen que desde su génesis, tiempos de Hugo Chávez, dijeron venir con la finalidad de rescatar los derechos de los excluidos y el logró de su bienestar a través de la administración “decorosa” de la hacienda pública fundada en la disciplina del socialismo de siglo XXI.

Tantos lamentos, tanto decir que ya pocas cosas nos sorprenden y no es así, realmente; no tiene techo la desfachatez dentro de esta casta que se hizo llamar socialista para ganar la simpatía de los humildes. Por ejemplo, el engendro concebido de la izquierda latinoamericana del Foro de Sao Paulo, muchos de sus egresados presidentes suramericanos hoy están de tras de rejas pagando condena por su actuación de prosaicos robadores.

Tomé nota de un análisis escrito hace pocos días que trata, precisamente, con puntos que son coincidentes con los que hoy desarrollamos: “Lula da Silva afortunadamente ya está preso y no puede desde su celda seguir engañando al mundo como el obrero que elevó a Brasil hasta el nivel de una potencia emergente que se perdía de vista en el panorama mundial y servía de ejemplo en la lucha contra el hambre y la pobreza”. El engaño tarde o temprano queda al descubierto. Hoy se sabe que se corrompió como cualquier gobernante para dolor y rabia de sus seguidores. “Supuestos héroes de izquierda reventó luego en Argentina con la pareja más siniestra que ha conocido el país sureño en estos últimos y oscuros años. Néstor y Cristina Kirchner, presidentes en seguidilla de la atormentada Argentina. Si el “tuerto” Néstor (como lo etiquetaba la lengua larga de Pepe Mujica) sabía hacer negocios desde el poder, pues su esposa y ahora viuda no se le quedaba atrás. Cada uno acumuló su fortuna rápidamente y sin paciencia alguna”. Esto para no seguir mencionando a los bandidos de los Castros, más recientemente el ecuatoriano Rafaela Correa, o el nicaragüense Daniel Ortega y La Chayo, Rosario Murillo, la extravagante primera dama y vicepresidente de Nicaragua.  Hay numerosos puntos de concurrencias entre ellos que se rigen por el mismo patrón.

garciamarvez@gmail.com

 




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.