La molestia entre los arrendatarios se hizo sentir una vez más en el mercado periférico de La Candelaria, luego que este lunes funcionarios de la Policía Municipal de Valencia procedieran a cerrar las instalaciones de ese centro de ventas.
Afortunadamente para ellos la medida se cumplió por espacio de una hora aproximadamente, luego que argumentaran que el decreto presidencial permite estar abierto a todo expendio de alimentos y medicinas, en medio de la pandemia.
Los clientes se retiraron al momento del cierre, pero los arrendatarios hicieron valer su derecho, y a eso de las 10:30 am, las puertas estaban de la edificación estaban abiertas de nuevo.
Chanel Sumoza, miembro de la Asociación de Expendedores del Mercado Periférico, dijo que no se justifica que ordenen el cierre del establecimiento, porque además de tener prioridad por vender alimentos, allí se cumplen con todas las medidas de bioseguridad para evitar contagios con la COVID-19.
Subrayó que de acuerdo a una ordenanza sobre mercados municipales, este establecimiento depende de la Dirección de Servicios Públicos, pero desde que fue creada Corpociudad, allí acuden funcionarios que hablan en nombre del alcalde para ejercer funciones que no les corresponden.
Comentó que la mañana de este lunes unos funcionarios policiales cerraron el mercado, sin mostrar el decreto donde se acordó la medida. Cuando se les reclamó supuestamente ofendieron a los comerciantes.
Sumoza pide al alcalde que visite el mercado para que verifique que allí no hay aglomeraciones de personas. Cosa que no ocurre con los negocios de los alrededores, donde no se toma ningún tipo de medidas.
Agmi Guerrero, otro arrendatario, señaló que por efecto de algunos cierres arbitrarios que se han hecho en ocasiones anteriores, un buen número de arrendatarios se ha retirado.
Apuntó que no están vendiendo mucho por la situación económica del país. Además en el cruce de las avenidas Aranzazu con Enrique Tejera, la policía pone unos conos para impedir el paso, lo cual aleja a la clientela pues piensan que el mercado está cerrado.
Insistió en que allí se cumplen con las medidas de bioseguridad, por lo que no entienden el ensañamiento contra los comerciantes del mercado.
