El canciller de Costa Rica, Manuel González, consideró que la decisión de la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) de abrir un examen preliminar a Venezuela por posibles abusos de sus fuerzas de seguridad, es un paso que va en la dirección correcta.
"Así como tiene que funcionar la institucionalidad interna de los países, la internacional también debe funcionar. En ese sentido es un paso que va en la dirección correcta", afirmó González en una entrevista con EFE en Madrid.
La crisis en Venezuela fue uno de los temas que el canciller costarricense trató con su homólogo español, Alfonso Dastis, en la reunión que mantuvieron hoy en la capital española.
Costa Rica forma parte del conocido como Grupo de Lima, compuesto por doce gobiernos americanos críticos con el Ejecutivo venezolano, y como uno de los miembros hemos sido muy claros en el destrozo que ha habido, no solo en la economía, sino también en la institucionalidad y la democracia en ese país, expresó González.
Según el canciller, la situación de Venezuela es muy grave, y no reconocemos ni las resoluciones de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), ni siquiera su convocatoria, que era contraria a la propia Constitución venezolana, y que además ha llevado a lo que existe allí, que aunque sus autoridades lo nieguen, es una crisis humanitaria.
"Nosotros lo vemos en el tema de la migración que estamos recibiendo todos los países, en alimentos, medicinas, y esa es nuestra principal preocupación, pedir a las autoridades venezolanas que permitan el ingreso de ayuda humanitaria a los miles de venezolanos que la necesitan", reclamó González.