Este domingo, viviendo ya en la propia anualidad del 2023, me decidí por recordar algo del pasado confuso de la Venezuela del siglo veinte, que ahora arrastramos en las actualizadas dos primeras décadas del siglo XXI.

¿Cómo vendrán las cosas? ¿Peor imposible? ¡Seamos optimistas!

Hablamos un poco más sobre opiniones, posturas, críticas, y las variadas “recreaciones” del “vecindario” político venezolano e internacional, como poco ha dejado de serlo hasta el hastío en estas décadas sucesivas que no hemos podido quitarnos desde el amanecer hasta el atardecer de cada día.

Desde que se ha agudizado la crisis actual en Venezuela, que para algunos es una historia larga, con más de medio siglo, hemos oído a analistas políticos, a economistas de todas las tendencias, a gente del gobierno o de la oposición, a demócratas y autócratas, sanos e insanos, “a buenos” y a “malos”.

Hemos visto como se acuñan frases en entrevistas de televisión, en los mítines públicos y en otros encuentros del crecimiento político, ideológico y ciudadano, que suenan como muy auténticas, honestas, y hasta radicales o bonitas.

Hemos oído decir tantos decires, por ejemplo, como que: “de lo malo hacia lo bueno, muy bien la pasamos”. Y, en sentido contrario, en la plena calle que genera de opiniones, escuchamos que: “de lo bueno a lo malo, muy mal la pasamos”.

Según el fondo de estas expresiones, “se entiende que debemos sentirnos muy satisfechos de cómo estamos porque, aun con lo mal, nunca hemos estado mejor”. ¡Una “salida” propia del quehacer callejero venezolano!

Es como admitir la vitalidad del viejo proverbio que dice: “agarrando, aunque sea fallo”. Pero disfrutemos el contradecir analítico vivazmente presente en todas estas tantas expresiones.

¡Qué tamaño de disparate seria afirmar que estamos bien, cuando no es verdad! Y agregar que estamos muy satisfechos, sería total desvergüenza, porque sólo asi pueden estar bien, aun de conciencia, los bandidos y los delincuentes.

Es razonable pensar que aquellos que nada tienen que perder, crean que es imposible llegar a estar en condiciones peores o más extremas. ¿Qué podemos pensar y hacer en situaciones como estas, cuando se nos exige generar respuestas precisas o tomar decisiones eficientes?

Muchos podrían alegar que no estamos metidos en lo peor, ni que hemos llegado al fin de mundo. Otros dirán que las cosas no están del todo mal; creerán que solo hay exageraciones de gente malintencionada, o que son decisiones disparatadas y sin fundamentos.

¿Es posible que pretendamos “matar” los problemas al decir que no es verdad lo que algunos irresponsables piensan o hacen, y al alegar que es posible que estemos peor o que, de hecho, casi siempre hayamos estado peor, sencillamente porque “el mundo es asi”?

En momentos difíciles, podríamos encontrarnos metidos en un laberinto, casi sin salidas, ni opciones valederas; pero si desconocemos en cual ubicación exacta del laberinto nos encontramos, nunca saldremos de él, aun cuando para darnos ánimo y practicar el autoengaño, repitamos a cada rato, y una vez más, que “no estamos metidos en lo insoluble”, ni hemos llegado al fin del mundo.

Pero sigamos insistiendo en reconocer que, para como están las cosas, la verdad es que: ¡peor, imposible! ¿Pero a esta altura de la discusión, aun cuando lo tomemos a la ligera y con extrema simpleza, seria honesto afirmar que ya no podamos estar peor de lo que estamos?

Esto no es un comentario más: ¡esto, amigos lectores, es un hecho que solo al enfrentarlo podríamos llegar a superar, para beneficio de nuestro progreso y de nuestro regreso a la realidad! ¡Porque las cosas están, peor imposible! ¡Pensémoslo!

¿Como vendrán los cambios?

Hernani Zambrano Giménez, PhD.

hernaniz@yahoo.com

Psicólogo Clínico e Industrial: Universidad Central (Venezuela). Maestria y Postgrado doctoral (Stanford University, USA). Director de Escuela de Educación, Universidad de Carabobo (Venezuela). Director de Escuela de Psicología, Universidad Arturo Michelena, Valencia (Venezuela). Profesor universitario. Asesor y gerente de empresas (Venezuela y otros paises). Escritor, periodista, analista. Productor, locutor (Radio 104,5 FM, Universidad Carabobo). Certificado de locutor: 0235. E-mail: hernaniyo@outlook.com / hernaniz@yahoo.com
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