Dayrí Blanco | @DayriBlanco07
2018 será un año difícil. El desempleo y la caída de la producción persistirán. Al menos mil empresas en el país no abrirán en enero como consecuencia de un conjunto de factores que hacen inviable la actividad económica en Venezuela.
Así lo alertó Juan Pablo Olalquiaga, presidente de Conindustria. Se trata de 27% de las compañías que aún sobreviven que no subirán sus santamarías tras el receso decembrino. “Esto sucederá principalmente por condiciones de entornos adversas como la hiperinflación con velocidad de empobrecimiento que acaba con los mercados, y la suma de los controles”.
Desde 1999 ya han cerrado nueve mil empresas en el país y durante lo que va de 2017 se han sumado otras 200. Pero el mayor impacto se sentirá a partir de enero, con la pérdida cada vez mayor de la capacidad productiva y de puestos de empleos.
Olalquiaga insistió en que mientras no haya ambiente de entorno de políticas económicas adecuadas este drama persistirá. “Necesitamos respeto por la propiedad y por el estado de derecho, que exista un solo Tribunal Supremo de Justicia, que se reconozca la Asamblea Nacional (AN), y que se indemnicen las expropiaciones”. De lo contrario, no existirá confianza para nuevas inversiones que impulsen la economía.