Escalofriantes detalles reveló el informe de la autopsia del rey del pop, Michael Jackson al que tuvo acceso el medio de comunicación The Sun, donde se devela el deterioro estado físico que tenía el compositor de “Thriller”, cuando murió a los 50 años a causa de un paro cardíaco provocado por una sobredosis de propofol, un potente calmante.
De acuerdo al medio, el cantante tenía pastillas parcialmente disueltas en el estómago y sobrevivía sólo con una pequeña comida al día.
Además, su cadera, muslos y hombros estaban cubiertos de marcas de pinchazos por causa de las inyecciones de analgésicos que recibía a diario de su médico personal, Conrad Murray, declarado culpable de homicidio involuntario por administrar incorrectamente la droga que condujo a la muerte del artista.
También, el citado medio dice que los labios del “Rey del Pop” resultaron tatuados de color rosa. Mientras que sus cejas de negros junto a la parte delantera de su cuero cabelludo para que combinara con el color oscuro de su cabello.
Añadieron que sus rodillas estaban misteriosamente magulladas y tenía cortes en la espalda. Su cuerpo estaba manchado, lo que confirmó que padecía vitiligo, una enfermedad de pigmentación. Pero, lo más inquietante resultó ser su cabello ondulado, hasta los hombros, era una peluca pegada a su cabeza pues, era calvo.
Según dijo una fuente al citado medio, “era piel y hueso; se le había caído el pelo y no había estado comiendo más que pastillas cuando murió”.
Informó The Sun, “Jackson comenzó a usar peluca tras sufrir quemaduras de segundo y tercer grado durante la filmación de un comercial de Pepsi en 1984”.
Trágico comercial
Es de recordar que durante el rodaje en el Auditorio Shrine de Los Ángeles, se le exigió que bajará un corto tramo por unas escaleras, mientras lanzaban fuegos artificiales a su alrededor.
Pero, un problema técnico durante la toma provocó chispas e impactaron en el rostro de Jackson, terminó con varias heridas.
Finalmente, a parte de su calvicie, la autopsia reveló cicatrices detrás de las orejas, en la nariz, en la base del cuello, en las muñecas y los brazos, entre otras zonas.
Por otro lado, la televisión británica ofreció algunas imágenes del dormitorio en el que pasaba sus noches el legendario cantante y bailarín, que se habían filtrado en los medios años atrás. Medicamentos, agujas, poemas pegados en las paredes y una muñeca de aspecto siniestro fueron algunos de los objetos hallados por los oficiales.
Los detectives que irrumpieron en la intimidad de la fallecida estrella describieron la habitación como un lugar “caótico” y atestado de medicamentos.
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