Ilustre médico a quien le corresponde el mérito de ser el Tercer
Protomédico de Venezuela, y el segundo profesional de la medicina
nacido en el país, considerando al doctor y docente Lorenzo Campíns y
Ballester (1726-1785), nacido en Palmas de Mallorca, islas Canarias,
fundador de los estudios de medicina en Venezuela, y el porteño José
Francisco Molina Sierra (1753-1788), segundo en la formación de los
futuros galenos; ambos fueron profesores de Tamariz, quien nació en
Caracas en 1759, sus padres naturales de Puerto Rico le permitieron
una adecuada formación académica en la Universidad de Caracas, de
donde egresó Bachiller en Filosofía en 1784; luego bachiller en
medicina en 1785, culminando en 1788 la licenciatura y el doctorado en
medicina.

Ejerció la docencia en la Real y Pontificia Universidad de Caracas,
alternando con la atención a los pacientes en los hospitales, en el
Seminario y en el Convento de los Franciscanos, todos ubicados en
Caracas. Tomando experiencias extranjeras implementó mejoras en la
formación de los futuros médicos, los cuales tenían que tomar notas,
por no existir en Venezuela imprenta, ni mucho menos material
bibliográfico proveniente de las naciones europeas.

El Dr. Tamariz participó activamente en la lucha contra el paludismo,
que tantas muertes causó a la población civil y a los soldados
republicanos cuando sitiaban las posiciones realistas, verbigracia
Puerto Cabello, rodeado con resultados fallidos en tres oportunidades,
debido a que, las bajas a causa del paludismo fueron mayores que las
causadas en combate. El Dr. Tamariz, fue un acérrimo enemigo de los
yerbateros y brujos que utilizaban otros procedimientos para producir
sanación. Recibió en Caracas en 1804, la famosa Expedición Sanitaria,
ordenada por el rey Carlos IV, salida de La Coruña en el navío militar
“María Pita” el 30 de septiembre de 1803, con la finalidad de vacunar
contra la viruela a la población infantil, ubicada en los territorios
de la América Española y Filipinas. Real expedición humanitaria
presidida por el médico Francisco Javier Balmis (1753-1812), que al
llegar a Puerto Cabello, continuó hacia Cuba, México y las Filipinas;
dejando encargado en Venezuela al doctor José Salvany (1777-1810),
valiosa actividad realizada en Caracas, Margarita, Cumaná, y
Maracaibo.

Continuaría hacia Cartagena, Bogotá, Quito, Chile, Perú y el Alto
Perú-Bolivia, donde falleció en Cochabamba a causa de los males
adquiridos en la noble travesía. El doctor Tamariz coordinó con sus
alumnos, lo referente a la distribución del material y la aplicación
de la vacuna descubierta en 1796 por el doctor inglés Edward Jenner
(1749-1823), médico rural que extraía de las ubres de la vacas una
costra o pústula, útil para formar un virus que previene la viruela,
de allí proviene la denominación de la palabra “vacuna”. El niño Luis
Blanco, nacido el 25 de junio de 1802, fue el primer vacunado en
Venezuela en 1804. El galeno Vicente Salias, autor de nuestro glorioso
Himno Nacional, también tuvo activa participación en esta jornada de
vacunación. Esta experiencia sanitaria, promovió al Dr. Tamariz
escribir con la colaboración del presbítero José Ignacio Moreno y el
médico José Joaquín Hernández, Cuarto Protomédico, la obra: “Memoria
sobre el modo de extinguir pronta y eficazmente el contagio de la
viruela natural en la capital y demás lugares de la provincia”. En
Caracas pudieron vacunar dos mil niños y en la provincia de Venezuela
un total de veinticinco mil; Don Andrés Bello recuerda esta actividad
sanitaria con su obra “Oda a la Vacuna”. A la llegada a La Guaira de
Francisco de Miranda el 10 de diciembre de 1810, Tamariz se incorporó
en la Sociedad Patriótica con un grupo de jóvenes de avanzada,
participando en las actividades, que propiciaban la emancipación del
régimen realista; sufrió de persecuciones y amenazas.

Salió en la Emigración a Oriente, comandada por el Libertador el 7 de
julio de 1814, atendiendo a los caraqueños que en número de veinte mil
huían de Boves; de cada tres personas, una pudo llegar a Barcelona o
Cumaná. Nuestro destacado biografiado falleció en Barcelona a manos de
los seguidores del temible asturiano en 1814.

Por iniciativa del médico guariqueño Julio de Armas, la Biblioteca de
la Academia Nacional de Medicina lleva el insigne nombre del Dr.
Felipe Tamariz.




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.