La Fiscalía española ha pedido al Ministerio de Interior que consulte a Suiza sobre la posibilidad de detener y extraditar al expresidente regional de Cataluña Carles Puigdemont, después de que anunciara su visita a ese país el próximo domingo.
Puigdemont, huido de la Justicia española por su implicación en el proceso secesionista catalán, está en Bélgica desde finales del mes de octubre, tras la fracasada declaración de independencia de esa región.
La Fiscalía pide al Tribunal Supremo, que lo investiga por presuntos delitos de rebelión y sedición, entre otros, que le retire el pasaporte.
De momento, sobre el expresidente catalán pesa una orden de detención si pisa suelo español, pero hasta ahora no se ha actuado contra él cuando se ha movido por países europeos.
El fiscal ha pedido a Interior que, en colaboración con Interpol, haga las gestiones necesarias ante las autoridades competentes de Suiza a los fines de determinar la viabilidad de la detención de los fugados y de su reclamación a efectos de extradición.
Esta posible detención y extradición se refiere no solo a Puigdemont, que ha anunciado que piensa viajar a Suiza para una intervención pública, sino también a la exconsejera de gobierno Meritxell Serret, que le acompañaría.
También extiende su petición a Anna Gabriel, dirigente del grupo independentista antisistema CUP, que ya está en Ginebra y no compareció ante el Tribunal Supremo cuando fue citada como imputada también por su implicación en el proceso secesionista.
El pasado 12 de marzo, la Fiscalía anunció que pediría orden internacional de detención contra Puigdemont, los cuatro antiguos miembros de su gobierno que le acompañan en Bélgica y la dirigente de la CUP Ana Gabriel, una vez se haya dictado orden de procesamiento contra ellos.
