La Divina Pastora es la advocación mariana que tiene más seguidores en Venezuela, y cada día crece más la devoción por su sagrada imagen.
El lema para la peregrinación de este año será: “María, signo de reencuentro”.
Luego de dos años de procesiones virtuales, por efecto de la pandemia por el COVID-19, este 14 de enero la patrona sentimental de Barquisimeto sale de nuevo a las calles a reencontrarse con sus fieles, en un recorrido que supera los siete kilómetros.
Se trata de la peregrinación número 165 de la virgen, en la que se calcula que participarán más de dos millones de personas, según los organizadores de la actividad, entre los que se encuentra el obispo de San Felipe, y administrador apostólico de la Arquidiócesis de Barquisimeto, monseñor Hugo Basabe.
A la procesión acuden personas desde distintos sitios del país, y hasta de otras naciones. Esta vez participará el doctor Jorge Pérez, quien partió hace cuatro días desde Valencia, caminando hasta el estado Lara, para pedirle a la virgen que ablande los corazones de los gobernantes y recuperen la maternidad del sur, donde ejerció por muchos años como gineco-ostetra.
La mayoría de los fieles que participan en la procesión lo hacen para agradecer o pedir favores por cuestiones de salud, pero también por la recuperación económica del país que afecta a toda la población por igual.
El recorrido con la sagrada imagen comienza en el pueblo de Santa Rosa, para llegar a la catedral de Barquisimeto, donde se queda hasta el sábado que precede al Domingo de Ramos, cuando es retornada a su iglesia original.
Esta fiesta en honor a la Divina Pastora, que se celebra todos los años en el estado Lara, es considerada la tercera concentración Mariana más grande del mundo, después de la Virgen de Guadalupe en México y la Virgen de Fátima en Portugal.
En Venezuela, la veneración por la esta advocación mariana se remonta al año de 1736. Sin embargo, la primera procesión data del 14 de enero de 1856 cuando los feligreses sacaron su imagen para pedir ayuda por la epidemia de cólera que se desató en el país en 1855.
MILAGROS
Wikipedia recoge que sucesos como el del terremoto del 26 de marzo de 1812 y la erradicación de la peste del cólera en el año 1856, son atribuidos a milagros concedidos por la virgen.
Sin embargo obras tan relevantes como una sanación hasta un simple acompañamiento espiritual son inmensamente agradecidos por sus devotos. El amor por esta advocación de la Virgen llega a tal punto que la celebran desde cualquier lugar del mundo en donde se encuentren grupos de venezolanos organizados.
