La USTA, responsable de la organización del Abierto de Estados Unidos de Tenis que va a comenzar, mañana lunes, en las pistas de Flushing Meadows (Nueva York), confirmó a través de un comunicado oficial que habido un caso positivo de COVID-19 de un jugador.
De acuerdo al comunicado oficial ofrecido por la USTA, el jugador que dio positivo y que es asintomático ya fue retirado del torneo y será sometido a 10 días de cuarentena.
La USTA, junto con sus asesores médicos y el especialista en enfermedades infecciosas del Sistema de Salud Mount Sinai, confirmaron un resultado positivo en la prueba de un jugador.
De acuerdo con los requisitos del Departamento de Salud del Estado de Nueva York, y de acuerdo con las pautas de los CDC y los protocolos de salud y seguridad del Torneo, se le ha informado al jugador que debe aislarse durante al menos 10 días.
Además, se ha iniciado el rastreo de contactos para determinar si alguien debe estar en cuarentena durante 14 días.
La información llega cuando todo está listo para que el torneo de comienzo con el serbio Novak Djokovic, flamante campeón del torneo de Cincinnati que se disputó esta semana en las mismas pistas, e invicto esta temporada (23-0) como favorito al título en la competición masculina.
Mientras que en la competición femenina, la gran favorito volverá a ser la estadounidense Serena Williams, quien buscará su séptimo título en el Abierto y el 24 de Grand Slam de su carrera, que le pueda permitir empatar con la legendaria Margaret Court.
La gran novedad del torneo, al margen de disputarse, sin público, y bajo el sistema de burbuja, es la ausencia del español Rafael Nadal, el campeón defensor, que no quiso competir debido a la pandemia del coronavirus.
Tampoco estará el legendario suizo Roger Federer, cinco veces ganador del Abierto, que se recupera de una operación de rodilla.
