El ministro de Energía Eléctrica de Venezuela, Luis Motta Domínguez, indicó que subió a 10 la cifra de personas que han muerto en los últimos días en actos de «sabotaje» contra instalaciones eléctricas controladas por el Estado.
«Hoy 14 en la madrugada lamentablemente fallecieron dos personas más y ya van 10 personas que han fallecido en menos de 12 días en ataques sistemáticos al sistema eléctrico nacional», dijo Motta en declaraciones transmitidas por el canal estatal VTV.
El ministro explicó que los fallecidos de este martes quedaron identificados como Ricardo Casanova y Jimmy Sandoval, y que durante las irregularidades registradas en los últimos 12 días al menos dos personas han resultado heridas y mientras que otras seis permanecen detenidas.
Detalló que durante la madrugada del domingo cuatro personas ingresaron a una subestación eléctrica ubicada en el céntrico estado Carabobo, donde crearon un cortocircuito que dejó temporalmente sin el servicio eléctrico a tres municipios de esta entidad, que ha recibido, según dijo, cuatro intentos de sabotaje en los días recientes.
Paralelamente, aseguró, 7 personas fueron detectadas por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) en otra instalación ubicada en el estado Miranda (centro).
Motta señaló que este caso terminó con un intercambio de disparos en el que uno de los supuestos saboteadores fue herido y posteriormente detenido.
Sugirió que todos estos ataques pudieran estar relacionados con la oposición venezolana que busca afectar «instalaciones que están relacionadas con los servicios del pueblo» como procesadoras de alimentos y galpones del programa gubernamental de viviendas gratuitas.
«Todo esto con el fin de crear el caos, el desasosiego y preparar el ambiente para cualquier acción violenta que quieran de una forma justificar en los próximos días», dijo y agregó que la marcha convocada para el 18 de febrero por el partido Voluntad Popular, fundado por el opositor encarcelado Leopoldo López, no tiene «buenas intenciones».
El ministro ha dicho que estos «ataques sistemáticos» responden a planes de «desestabilización» de «la derecha» venezolana y que las autoridades van a tomar «las medidas que sean necesarias», para aplicar «todo el peso de la ley», a quienes ataquen el sistema eléctrico nacional.
