La canciller alemana, Angela Merkel, garantizó que su país será solidario con quien haga sus deberes en la Unión Europea, pero insistió en la necesidad de que los socios mantengan la responsabilidad presupuestaria y el curso de las reformas.
«Quien haga sus deberes puede contar con nuestra solidaridad, pero con nosotros no será posible que alguien viva a costa del otro», garantizó Merkel ante el congreso extraordinario de la Unión Cristianodemócrata (CDU), que debe votar hoy el acuerdo de coalición de gobierno con los socialdemócratas.
Ante la apuesta del Partido Socialdemócrata (SPD) por mayor solidaridad en Europa, Merkel se comprometió con el lema que ha guiado a Alemania durante la última crisis del euro: la estabilidad financiera exige responsabilidad y disposición a las reformas.
La canciller consideró que sería totalmente ingenuo e irresponsable pensar que lo que pasa en el entorno no afecta a Alemania e instó a tomar las riendas del destino del país y de Europa antes de que lo hagan otros.
Apostó así por un resurgimiento de la UE, que es demasiado débil en muchas áreas y necesita dinamismo económico, más innovación, luchar contra el elevado paro juvenil y actuar de forma inmediata para estabilizar el euro y combatir el exceso de deuda
La CDU votará hoy el pacto suscrito con el SPD para reeditar la gran coalición, pero habrá que esperar al próximo domingo para conocer la opinión de los militantes socialdemócratas, convocados a una consulta interna de carácter vinculante.
Si los afiliados del SPD dan luz verde al acuerdo, se podrá constituir finalmente el nuevo gobierno alemán, el cuarto encabezado por Angela Merkel.
