Este domingo 28 de marzo se cumplieron tres años de la llamada Masacre de la Comandancia General de la Policia de Carabobo, ubicada en la calle Navas Spinola, Valencia, lo que la defensora de derechos humanos Lyli López catalogó como “una de las fechas más trágicas de la historia penitenciaria venezolana”.
Cabe recordar que tras un incendio generado en los calabozos de la mencionada instancia policial “perdieron la vida 69 seres humanos, 67 de los cuales se encontraban bajo custodia del Estado, y dos mujeres que pernoctaban allí, una de ellas embarazada”.
Para entonces, los reclusos protestaban por el hacinamiento y por una requisa realizada durante el turno de la visita, lo que les llevó a prender fuego a unas colchonetas. El asunto terminó en la tragedia ampliamente difundida.
Sólo cinco funcionarios arrestados
A través de su cuenta en la red social Instagram, López, también presidenta del Comité de Víctimas de este hecho, señaló que sólo cinco funcionarios policiales han terminado detenidos y acusados de los más de 58 que, bajo órdenes superiores, tomaron las armas del parque de armas y practicaron una arbitraria requisa “que vulneró los principios fundamentales del respeto a la vida y de las normativas de la legislación venezolana”.
Señaló, además, que tales actuaciones constituyeron un evidente incumplimiento de diversas obligaciones derivadas de compromisos internacionales asumidos por la República que comprometen la responsabilidad del Estado Venezolano, en especial por el hacinamiento de 151 personas detenidas en dicho calabozo.
Audiencia preliminar diferida una veintena de veces
López lamentó que haya sido diferida, unas 24 veces, la audiencia preliminar del caso y que durante los últimos años se hayan visto pasar diferentes fiscales, jueces y hasta defensor del pueblo. “Continúa el silencio ante la solicitud del 5 de noviembre de 2019 a la fiscalía 35 del Ministerio Püblico para la exhumación de varios cadáveres. Persiste el silencio cómplice que alimenta la impunidad”.
Finalmente, enfatizó en que los delitos contra los DD.HH. cometidos por sus autoridades no prescriben. “La Justicia siempre llega y no existen crímenes perfectos, porque las pruebas saldrán a la luz y se determinarán otras responsabilidades como la desaparición de dos cuerpos, de los que aún se desconoce su destino”.
