Puesto de venta ambulante de plátanos en Caracas. Foto cortesía: Reuters/Mariana Bazo

Un hongo resistente que marchita las plantas de banano y plátano e infecta el suelo podría empeorar la crisis alimentaria en Venezuela, donde 6,5 millones de personas ya padecen hambre, dicen grupos de productores y una agencia de las Naciones Unidas.

Reuters reseñó que el hongo Fusarium tropical raza 4 ha sido localizado hasta el momento en los estados centrales de Aragua, Carabobo y Cojedes.

El Instituto Nacional de Sanidad Agropecuaria de Venezuela detectó oficialmente el fusarium en enero, pero los productores y otros expertos dicen que ha habido evidencia del hongo durante años y temen que pueda propagarse rápidamente.

“Como el 15% de mi banano está afectado”, dijo en entrevista telefónica el agricultor Tomás Malavé, de 46 años, quien tiene 2.200 plantas en su área de cultivo de banano de una hectárea en Aragua.

Malave precisó que probó varios remedios a lo largo de los años, sin saber exactamente qué estaba afectando a sus plantas: “Lamentablemente vi esta enfermedad hace años pero recién este año las instituciones determinaron la causa”.

Su vecino Gregory Gamboa, de 49 años, vio marchitarse la mayoría de sus plantas de banano hace varios años y ahora cultiva otros rubros. «Lo intentamos todo, pero perdimos el banano».

Venezuela está lidiando con una crisis económica de larga duración y poco menos del 23% de la población sufre hambre, según un informe del año pasado de las Naciones Unidas.

La inflación anual fue de un asombroso 471% en abril, según el Observatorio Venezolano de Finanzas independiente.

Las familias que luchan por comprar alimentos dependen tanto de las bananas como de los plátanos. Un kilo de cualquiera de estas frutas generalmente cuesta entre $1 y $2.

El salario mínimo mensual equivale a solo $5 y muchas familias dependen de las cajas de alimentos del gobierno o de las remesas de familiares en el exterior.

Energía e ingresos

Para los pequeños agricultores, las bananas y los plátanos son tanto una fuente de energía, carbohidratos y azúcar como una fuente de ingresos, explicó Alexis Bonte, representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en Venezuela.

“Si la gente no tiene su banano, no tiene una fuente de energía y no tiene dinero para comprar esa energía de otras fuentes, entonces es un doble castigo”, destacó Bonte.

El hongo, que seca gradualmente las plantas y se esparce por el suelo infectado, afectó hasta el momento a unas 150 hectáreas y a unos 1.000 pequeños productores, precisó.

La única forma de erradicar el fusarium es arrancar las plantas y sembrar otros cultivos como maíz o granos que no sean susceptibles al hongo, dice la FAO. Fusarium no daña a los humanos.

No está claro cómo el fusarium, detectado en la vecina Colombia hace tres años y en Perú el año pasado, llegó a Venezuela, pero podría haber llegado a través de una planta contaminada, un camión o incluso en el calzado.

Hay unas 28.000 hectáreas sembradas de plátano y unas 32.000 de banano en Venezuela, dijo Saúl López, presidente del Colegio de Ingenieros Agrónomos, que advirtió en 2019 que era probable que llegara el hongo e instó al Gobierno a aplicar controles sanitarios.

El gobierno ha prohibido el transporte de semillas entre los tres estados donde se ha detectado fusarium, según asociaciones de cultivadores.

Pero los productores dijeron que los camiones y los trabajadores deben ser lavados y que se necesitan más controles en la frontera con Colombia.

Ni el Ministerio de Información ni el Ministerio de Agricultura respondieron a las solicitudes de comentarios.

El hongo aún no ha sido detectado en el estado productor de banano y plátano más grande de Venezuela, Zulia, que tiene alrededor de 10.000 hectáreas de cultivos, según la asociación de promoción del plátano Fumplaven.

“Aquí todo el mundo le tiene miedo al hongo porque va a acabar con todo”, destacó el productor zuliano Domingo Mora, de 36 años. “Tener el hongo significaría más hambre y más pérdidas de las que ya tenemos”.




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.