El primer viaje de Donald Trump al extranjero comenzó con el anuncio de importantes contratos de más de 380.000 millones de dólares, incluidos 110.000 millones en ventas de armas a Arabia Saudita para hacer frente a las amenazas de Irán.
La llegada del presidente estadounidense a Riad, donde pronunció un discurso sobre el islam, contrastó con el recibimiento glacial que recibió hace un año el ex presidente Barack Obama, criticado por su acercamiento a Irán, gran rival de Arabia Saudita.
Además de las reuniones bilaterales, como la que mantuvo con el rey Salman, Trump dedicó el primero de sus dos días en Riad a las inversiones, con una serie de contratos colosales. La catalogó como una jornada formidable para invertir en empleos.
La agencia oficial saudita, SPA, informó de 34 acuerdos en campos tan diversos como la defensa, el petróleo y el transporte aéreo. Adel Al Jubeir, ministro saudita de Relaciones Exteriores en una rueda de prensa conjunta con su homólogo estadounidense, Rex Tillerson, declaró que el valor de las inversiones supera los 380.000 millones de dólares.
AFP