Nunca hay edad para cuidarse emocionalmente ni para buscar ayuda, en el caso que lo necesite. Estas fueron algunas de las premisas que transmitió la psicóloga Yorelis Acosta este sábado en Valencia, duran un taller que dictó en la Asociación de Ejecutivos del Estado Carabobo, dirigido a periodistas de la región.
El taller forma parte del programa Periodismo en Contexto de Violencia, que lleva a cabo conjuntamente con las periodistas Yira Yoyotte y Beatriz Adrián, con la finalidad de ayudar a los comunicadores sociales a manejar ciertas circunstancias que se presentan en el quehacer diario.
La presentación de la actividad estuvo a cargo de la presidenta de la AEEC, Nicoletta Di Franco, quien manifestó su satisfacción por la realización del taller en esos espacios e invitó a que se hagan muchos más.
Luego de una breve introducción a cargo de Yira Yoyotte, tomó la palabra la psicóloga clínico y social, Yorelis Acosta.
La expositora señaló que el tema de la salud mental en periodistas ha sido tratado hasta por la Unesco, porque están siempre sometidos a presión. Por eso es necesario que puedan contar con estrategias de protección y cuidado mental.
La especialista identificó los síntomas de la ansiedad conductual como: Estados de alerta de hipervigilancia, bloques o dificultad para actuar, impulsividad, inquietud motora y dificultad para estar quieto y en reposo.
Estos síntomas vienen acompañados por cambios en la expresividad y lenguaje corporal, posturas cerradas, tensión en las mandíbulas, cambios de voz y tos, entre otros.
Explicó que una de las principales causas que agravan la ansiedad es la hiperventilación, pues no respirar correctamente hace que el organismo obtenga un exceso de oxígeno, provocando una sensación de ahogo y mareos que hacen que las personas se sientan peor.
Por eso aconsejó aprender técnicas de respiración, realizar ejercicios de relajación o practicar disciplinas como el yoga, ya que esto puede ser de gran ayuda para aprender a dominar nuestra respiración, ayudando así a evitar situaciones de ansiedad.
Siempre hizo hincapié en los ejercicios de respiración, porque son los más efectivos. Citó que en el caso de que una persona se de cuenta que otra está sufriendo un ataque de pánico, debe tomarla de la mano, tratar de generar confianza y pedirle que respire lento, mientras le soba el área del pecho.
Es muy importante trasmitirle nuestro apoyo, que se sienta acompañada, ya que la ansiedad es involuntaria y causa mucho sufrimiento a la persona que la padece.
Con la narrativa de distintas experiencias, Yorelis Acosta quiso dar a entender que hay que vivir la vida intensamente sin tomarse a pecho situaciones que se presentan y que no se pueden cambiar.
La parte más divertida estuvo a cargo de Francisco Soares, facilitador en terapia Gestalt, quien realizó una dinámica grupal que incluyó la risa como principal método de reajación.
En realidad fue una actividad excelente que dejó efectos positivos a todos quienes participaron en ella.
