EFE
La Fiscalía
portuguesa va a colaborar con las autoridades brasileñas en el proceso
"Lava Jato", que investiga al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva
por supuesto tráfico de influencias a favor de la constructora Odebrecht.
La Fiscalía lusa confirmó a Efe "la recepción de una
petición de cooperación judicial internacional, a través de una carta
rogatoria", por parte de las autoridades brasileñas.
El contenido de la solicitud es de "naturaleza
reservada" y la Fiscalía portuguesa aseguró que "no dejará de
investigar todos los hechos de relevancia criminal que lleguen a su
conocimiento".
El Ministerio Público Federal de Brasil abrió una
investigación penal contra Lula por supuestamente haber utilizado su
influencia, tras haber dejado la presidencia en 2011, para hacer que el banco
de fomento del Gobierno favoreciera a la constructora Odebrecht.
Lula habría influido para que el banco financiase proyectos
de la constructora en otros países latinoamericanos y africanos entre 2011 y
2014.
En el ámbito del proceso, las autoridades están investigando
varios viajes realizados por Lula a países como Panamá, Venezuela, República
Dominicana y Ghana que fueron costeados por Odebrecht.
La constructora ha admitido haber pagado algunos de esos viajes,
pero negó que el ex presidente trabajase como su consultor y señaló que el
motivo de los mismos era dar conferencias en el extranjero.
La prensa informó este fin de semana de que Lula le habría
solicitado también al primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, que tuviera en
cuenta el interés de Odebrecht en la privatización de la compañía portuguesa de
gestión de aguas y residuos EGF.
En ese sentido, se están investigando varios telegramas
diplomáticos que indican que las actividades de Lula a favor de Odebrecht en el
extranjero iban más allá de ser contratado para dar conferencias.
En concreto, se estudian dos mensajes sobre las visitas de
Lula a Portugal enviados por el embajador de Brasil en Lisboa, Mário Vilalva,
en los que se mencionaba que había comunicado a Passos Coelho el interés de
Odebrecht en EGF.
El Instituto Lula, que representa al ex gobernante, recibió
"con sorpresa" la noticia de la apertura de la investigación y
aseguró que "tendrá oportunidad de comprobar la legalidad y la decencia"
de todas sus actividades.
La investigación podría desembocar en un juicio a Lula, que
se celebraría en el ámbito de la justicia federal ordinaria puesto que el ex
presidente, al no ocupar en la actualidad ningún cargo político, no está
aforado.