Luis Alejandro
Borrero || lborrero@el-carabobeno.com
El servicio de oftalmología de la Ciudad Hospitalaria
Enrique Tejera (CHET) está paralizado desde hace cuatro semanas por falta de
energía eléctrica, reveló una fuente a El Carabobeño, cuya identidad ha sido
protegida. Eso pone en riesgo inminente la salud de pacientes, quienes podrían
quedar ciegos.
Es un servicio como ningún otro. Parece una clínica. Está
dotado con tecnología de punta y es pionero en Carabobo desde su inauguración,
el 4 de octubre de 2014. Pero no escapa de la delincuencia: hampones se robaron
el tendido eléctrico de aproximadamente 280 metros de longitud, lo que obligó a
que se cerrara y suspendiera cualquier actividad. Las operaciones pautadas
quedaron sin fecha.
Hay pacientes con afecciones en la retina, glaucoma y
cataratas que requieren intervenciones urgentes pero no pueden. “Los equipos no
se dañaron, allí están, pero apagados porque no hay cables”. Raúl Falcón,
presidente de Insalud, estaría al tanto
del robo, dijo la fuente. Pero se necesita más: el gobernador Ameliach debe
hacer lo posible para restituir la unidad en la que se gastaron 10 millones de
bolívares y con capacidad de atención de mil 600 personas mensualmente.
La parte de atrás del servicio colinda con Barrio Central.
Se presume que los delincuentes saltaron una pared y llegaron al techo de la
unidad oftalmológica. Allí picaron tubos, violentaron un cajón y se llevaron
los cables. “Son muy costosos. Ya hicimos la denuncia y las autoridades están
conscientes”.
Doctores ruegan que antes de enero pueda reactivar el
servicio con la dotación de los equipos que necesitan.
