Santa Misa por la Divina Pastora en Barquisimeto. Foto cortesìa El Impulso

Ante una multitud de feligreses que colmó la Basílica de Barquisimeto tras la procesión 165 de la Divina Pastora, monseñor Carlos Curiel, arzobispo de Carora, invitó a volver a María, pese a los difíciles momentos que se viven. A ella le pidió que interceda para que los venezolanos tengan salud, bonanza y alegría

Durante la homilía, celebrada la tarde de este sábado para celebrar la vuelta de María a las calles tras varios años de ausencia, monseñor envió mensajes de esperanza y unión para todos los venezolanos, a quienes los invitó a confiar y a caminar junto a María, reseñó El Impulso.

El arzobispo invitó a volver a María, a sentir su mirada. «Aunque nos encontremos en momentos difíciles, en momentos de muchas adversidades en los que estamos cansados, desanimados, abrumados por tantos problemas y promesas no cumplidas, por la falta de respuestas a las exigencias de un pueblo que quiere una vida digna, en libertad. Cuando estamos incluso desesperanzados, volvamos a María. Ella nos dice ¡Ánimo hijo, yo te sostengo!»

Recordó que la Madre de Dios conoce todos los anhelos que guardan sus hijos en sus corazones, desde sus tristezas hasta las alegrías más inefables, esas que están marcadas por momentos de gran importancia. Es por ello, que aprovechó la oportunidad para recalcar la necesidad de estar aferrados a la fe mariana.

«María es Madre y sabe muy bien cuáles son nuestras alegrías, nuestras tristezas; nuestras esperanzas y nuestras ilusiones«, dijo el Arzobispo en la homilía del día.

Bajo el cálido sol que se percibió en la ciudad de Barquisimeto esperaron miles de devotos, los cuales con signos de fe elevaron sus voces en cantos de alabanza, y también, guardaron silencio para encomendar sus más preciadas oraciones al ‘amor de los amores’ en este reencuentro con María.

La autoridad eclesiástica también elevó sus oraciones a Dios y a María, a quien le pidió que interceda ante el Padre para que todos los venezolanos puedan disfrutar de salud, bonaza y alegría. «Por fin nos llegó la gracia que tanto esperábamos, nuestra Madre, la Divina Pastora está de nuevo entre nosotros, a ella le pedimos para todos nosotros«, dijo.




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