La gestión del Gobernador de Carabobo, Francisco Ameliach, no ha sido efectiva en la lucha contra la inseguridad que afecta a los ciudadanos, ni se ha preocupado por atender la situación de los funcionarios de los cuerpos policiales que han sido asesinados para robarle sus armas de reglamento, entre otros casos fatales que no son investigados, expresó el diputado carabobeño a la Asamblea Nacional (AN), Marco Bozo.
Indicó que desde el parlamento trabajan por reivindicar las funciones de los organismos de seguridad y por garantizar estabilidad social a los funcionarios, quienes también son víctimas de la violencia y la impunidad que afecta a todo el pueblo venezolano.
414 funcionarios fueron asesinados a manos del hampa en 2016
Manifestó preocupación porque a su juicio, los carabobeños están sumergidos en una gran ola de violencia, donde en los barrios y en las comunidades son los azotes quienes dominan la zona y no la autoridad. Hizo un llamado al gobernador para que ponga atención a la problemática.
Enfatizó que el año 2016 fue calificado como el más violento, con 414 funcionarios caídos en manos del hampa, entre policías, militares y escoltas, mientras que tan solo en enero de 2017 se reportaron 10 víctimas en todo el territorio nacional, según el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
Al respecto, el legislador repudió las declaraciones del vicepresidente Tareck El Aissami, quien semanas atrás afirmó que los funcionarios de seguridad no están capacitados.
No se trata de que no estén preparados, es que no cuentan con las herramientas, trabajan en un sistema judicial corrupto y con una la Fiscalía que no actúa con celeridad para poder combatir la impunidad, sostuvo.
Estos asesinatos no deben seguir impunes, insistió Bozo, al tiempo que señaló que Ameliach tiene que dirigir sus esfuerzos en combatir el alto índice delictivo.
El coordinador regional de Primero Justicia, manifestó su solidaridad ante lo que caficó como un «duro atropello» a los efectivos de Valencia y del estado.
Nota de prensa