Valencia
(Foto: Archivo El Carabobeño)

Valencia es una ciudad de tradiciones arraigadas. No es casual que los niños y jóvenes sepan que el 13 de noviembre es una fecha especial porque se celebra el día de la patrona, la Virgen del Socorro.

Tampoco lo es que quieran explorar y hacer senderismo en sus diferentes montañas, que identifiquen la música flamenca como propia, ni que estén acostumbrados a una mezcla de sabores en los platos que sus abuelas sirven en la mesa.

Son legados que han pasado de padres a hijos y a nietos y que están vinculados a la identidad cultural de los valencianos. El historiador Luis Heraclio Medina Canelón aseguró que esto ocurre por la influencia directa de factores como la inmigración y, en el caso de Valencia, este es un proceso que fue masivo estimulado por las fuentes de trabajo derivadas de la creación de la zona industrial con su potencial empleador.

Procesión de la Virgen del Socorro

La fecha del 13 de noviembre está marcada en el calendario de los valencianos y en sus corazones marianos como la más importante del año.

Ese día se conmemora y celebra la festividad de Nuestra Señora del Socorro entre alegría, devoción y, sobre todo, agradecimiento.

Ya es tradición para los valencianos apartar esa fecha para acompañar a la imagen de su patrona en la Santa Misa y, posteriormente, a la procesión. La presidenta de la Cofradía Nuestra Señora del Socorro, Marina Bencomo, recordó que desde que la imagen llegó a la ciudad, en 1690, comenzó a celebrarse su fiesta y, al concluir, se hacía la procesión que, inicialmente, se era solo alrededor de la Plaza Bolívar.

Procesión de Nuestra Señora del Socorro.
(Foto: Archivo El Carabobeño / Rafael Freites)

Era un acto que se hacía el segundo domingo de noviembre, “pero desde el año 2010 se celebra el 13 de noviembre y, luego de la misa, hay una hermosa procesión por toda la avenida Bolívar del norte al centro”.

Bencomo resaltó que la Cofradía se fundó el 19 de mayo de 1616 por negros esclavos y pardos, quienes, al reunir el dinero, encargaron la imagen que llegó en 1690.

Viacrucis en La Guacamaya

El Parque Municipal Filas de la Guacamaya guarda entre sí muchos recuerdos. Ahí, cada Semana Santa se ve caminar feligreses en el tradicional viacrucis de El Calvario.

Ahí, en una extensión de terreno que rodea parte de la ciudad de Valencia, y que abarca las parroquias urbanas: San José y Candelaria, está La Ermita o Capilla de La Piedad, construida en 1905 y además conocida como la Estación del Viacrucis.

También se puede ver la Cruz Mayor o Cruz Grande de Valencia, llamada también Cruz de Constantino y construida en 1913 al celebrarse los 1600 años del Edicto de Milán; suscrito por Constantino El Grande.

Las Tres Cruces están ubicadas sobre un pedestal, que posee una base con compartimientos para encender candelabros con velas al realizar el tradicional recorrido religioso de El Calvario, durante Semana Santa.

Foto: Cortesía

El coordinador de Valencia La Nuestra, Edicson Leal, destacó que, al llegar a ese punto del cerro Parque Filas de La Guacamaya, se observa una magnífica vista de todo el valle de la ciudad.

“La comunidad más fervorosa de Valencia, la de La Pastora, tradicionalmente hacía dos viacrucis en la montaña, uno por la caja de agua y otro subiendo por lo que ahora es la avenida Fernando Figueredo”.

Parrandas y retretas

Son parte de la valencianidad aquellas retretas en la Plaza Bolívar “que fueron una tradición que recordamos los que ya tenemos algunas canas”, expresó el miembro correspondiente de la Academia de la Historia de Carabobo, Luis Heraclio Medina Canelón.

Allí la Banda 24 de Junio deleitaba las mañanas de los parroquianos.

También recuerda otra tradición particularmente valenciana como lo son las parrandas navideñas que, aunque generalmente las agrupaciones de parrandas como La Verde Clarita se originaron en el municipio Carlos Arvelo, “es tradicional que vengan a cantar a los hogares y calles valencianas”.

Foto: Cortesía

Ritmos flamencos

Escuchar un ritmo flamenco en Valencia es tan normal que parece una música propia de la ciudad. Está presente en la tradicional Misa Rociera, en eventos empresariales, ferias y hasta en bodas.

Hay personas de otros estados que escuchan esos ritmos y de inmediato lo asocian con Valencia y la razón, según la presidenta de la Sociedad de Amigos de Valencia y musicólogo, Anamaría Correa, es la migración de españoles que recibió la ciudad hace décadas.

“Pero es curioso, porque el flamenco viene de Andalucía, y no todos los españoles que llegaron a Valencia, y cuya descendencia sigue aquí, son de esa provincia”.

Ella es la encargada de dirigir la Misa Rociera en honor a la Virgen del Socorro que califica como una celebración hermosa llena de devoción y mucho sentimiento.

Foto: Archivo El Carabobeño / Andrés Galindo

Gastronomía de Valencia

La cocina valenciana es reconocida por ser muy familiar. Las principales preparaciones se centran en esas reuniones en casa que ameritaban grandes guisos con diferentes ingredientes e influencias de varas zonas del mundo como consecuencia de la migración.

Lo mismo ocurrió tras la revolución industrial que hizo que la ciudad se convirtiera en hogar de personas de diferentes estados que llegaron con sus propias costumbres culinarias, muchas de ellas se quedaron o se adaptaron a lo que ya se hacía.

La chef Zoraida Barrios, conocida como Mamazory, detalló que gracias a que en la ciudad hubo mucha ganadería, las preparaciones con queso eran centrales. Una de ellas es el quesito valenciano, “era una preparación de postín que se hacía los domingos y que se sirve aún en ocasiones especiales de las familias. Se hace con queso en láminas, cebolla, mantequilla y suero”.

La polvorosa de pollo de San Blas es, para muchos, el plato típico de Valencia. Su mezcla de sabores, entre el dulce y el salado la hacen única y, como el quesito valenciano, aún hay restaurantes que la tienen en su menú.

Foto: Cortesía

También destaca la ensalada diplomática que es dulce y se come en diciembre. “También tenemos la sopa de huesos claros, que nació en El Viñedo”.

Con la llegada de la comida rápida, la influencia se quedó instaurada con las tostadas, el cochino frito, cachapas y las empanadas operadas.




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