control
Desde el 1° de abril hasta la fecha, el dólar oficial se ha devaluado en 110%, mientras que el paralelo, en 111%. (Foto: AFP)

Lejos de oxigenar a la ya asfixiada economía venezolana, la implementación de un nuevo sistema de control de precios y el aumento salarial recientemente decretado por el régimen madurista solo servirán como caldo de cultivo para generar mayor miseria y destrucción del aparato productivo nacional, aumentando todavía más el riesgo alimentario preexistente, señaló el economista Carlos Ñáñez.

Este lunes 27 de abril, a través de Twitter y no de una cadena televisada como solía hacerse, fue anunciado el incremento del ingreso integral que entrará en vigencia a partir del próximo 1° de mayo: Bs. 400 mil de sueldo mínimo, más otros Bs. 400 mil correspondientes al bono de alimentación. Por otro lado, los pensionados recibirán Bs. 400 mil, más un bono de “Guerra Económica” por Bs. 300 mil.

Los Bs. 800 mil del ingreso integral equivalen a $4,5 mensuales, calculados a la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV), que al final de la jornada de este martes 28 de abril cerró en 175 mil 600 bolívares por dólar. Mientras que al cambio según la tasa paralela, ubicada en 181 mil 800 bolívares por dólar, representan $4,4. Estas cifras solo afianzan a Venezuela como el país con el salario más bajo de la región.

Para el también profesor de la Universidad de Carabobo (UC), el aumento representa “otra burla” por parte de Nicolás Maduro. En lugar de aliviar al golpeado bolsillo de los venezolanos, solo provocará más hiperinflación y un mayor incremento de los precios, que ahora también estará asociado a una abierta posibilidad de acentuación de los niveles de escasez y desabastecimiento en medio de la  pandemia  de COVID-19.

El BCV publicó la semana pasada, a destiempo, los indicadores económicos del país. La inflación intermensual del diciembre pasado fue de 50% y la acumulada hasta marzo de este año alcanzó 104%. Asimismo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyectó una inflación al cierre de 2020 de 15 mil puntos porcentuales, con senda de crecimiento intermensual de 50%, alimentada además por el incremento del salario.

control
Ñáñez cuestionó que Maduro no haya ajustado el salario con base al petro. (Foto archivo)

Paralelamente, el mismo lunes también se oficializó la fijación de precios de al menos 27 productos alimenticios, bajo una inédita particularidad en los 22 años del chavismo-madurismo que sorprendió  a muchos analistas: se emplea el dólar como mecanismo de valoración, anclado a la cotización del BCV, según datos de una lista extraoficial. El bolívar, pulverizado por una hiperinflación sostenida durante más de 36 meses, quedó como una contraparte en la transacción.

“Quiere decir que aquel dólar criminal que hasta hace dos meses Nicolás Maduro indicaba que era el responsable de la crisis económica, ahora se utiliza como un mecanismo de fijación de precios”, dijo el especialista, en entrevista con El Carabobeño. “¿En dónde quedó todo aquel andamiaje ideológico de la reconversión monetaria, cuando se anunció un nuevo cono monetario anclado al petro?”.

Según sus palabras, con la regulación de precios asociados a la divisa norteamericana se oficializa la hiperinflación en la República. Además, se demuestra “el gravísimo fracaso de las políticas económicas maduristas, junto a la decisión de seguir manteniendo el desorden monetario” a través de la emisión de bolívares sin valor para financiar el gasto público y utilizar el dólar como esquema de transacción en un proceso que genera desigualdad.

Este miércoles 29 de abril durante un programa de radio, el expresidente de Fedecámaras, Jorge Roig, quien participó en las conversaciones entre parte del sector productivo y representantes de Maduro, aseguró que la lista de precios controlados no será publicada en Gaceta Oficial porque requerirá constantes ajustes y agregó que el valor de referencia ya no sería el dólar sino el petro.

Consecuencias del control de precios

Desabastecimiento, entendido como la imposibilidad de encontrar variedad de productos; escasez, cuando los productos dejan de estar disponibles; y finalmente, la aparición de mercados negros o desregulados en los que registra reventa a sobreprecio, son algunas de las consecuencias que trae consigo el control de precios, explicó el catedrático de la UC.

Puntualizó Ñáñez que con esta medida también se promueve el desmantelamiento de la producción agrícola, ya que ningún productor se atreverá a sembrar si el producto ya tendría un precio predeterminado desde antes de la cosecha. Otro sector afectado serían los pequeños empresarios, quienes no tienen la capacidad para sostener los precios controlados.

Desde el viernes 24 de abril empresas Polar ha sido fiscalizada bajo procedimientos irregulares. (Foto archivo)

El viernes 24 de abril el régimen madurista anunció la toma de la empresa Coposa, la más grande en producción de aceites y oleaginosas en Venezuela, así como también la fiscalización de Plumrose y Alimentos Polar, esta última a cargo de la producción del 80% de los alimentos que consumen los venezolanos.

En caso de Polar, las autoridades del madurismo le eliminaron el acceso al Sistema Integrado de Control Agroalimentario (SICA), una herramienta ideada durante el mandato del fallecido presidente de Hugo Chávez “a los fines de dirigir la producción de las empresas agroalimentarias no a sus mercados naturales, sino a donde la planificación centralizada del régimen lo quisiera”.

La planta de Polar en Turmero, Aragua, estuvo al borde del colapso ya que ante la ausencia del código SICA no podía  hacer la distribución de sus productos y el inventario comenzaba a acumularse. Fue este martes 28 de abril cuando la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) informó sobre el restablecimiento del usuario y contraseña de la empresa en el sistema.

¿Especulación?

Ñáñez consideró que el problema de la economía venezolana no tiene que ver con supuestos esquemas especulativos, sino con la deconstrucción  comunicacional de la narrativa para la libertad, el desarrollo y el progreso. “El chavismo ha implementado una neolengua para justificar su fracaso en materia política, económica, social e institucional. Frente a la hiperinflación, se crearon ese concepto de especulación”.

En el país queda un conjunto de alrededor de dos mil empresas, operando a 16% de  su capacidad instalada, y un sector comercial contraído en más de 80% que, a juicio del profesor universitario, son “verdadero sobrevivientes” de un proceso de depresión económica como nunca antes lo había visto el planeta en ningún país que no haya sufrido una guerra o una catástrofe natural.

(Foto: AFP)

Según sus consideraciones, quienes más pierden ante esta situación son el sector empresarial, el industrial y el comercial, que no tienen capacidad ni radio de acción para reponer inventario debido a que muchos de ellos realizaron ventas a crédito en marzo, con el tipo de cambio a 75 mil bolívares por dólar, que todavía están por cobrar.

País vulnerable

Venezuela tiene una situación de vulnerabilidad alimentaria al mismo nivel de países que han atravesado por prolongados conflictos bélicos y confrontaciones sociales, como Yemen (guerra civil), Afganistán (18 años en guerra), República Democrática del Congo (problemas posconflicto y guerrilla urbanas) y Sudán (guerra civil que dividió al país), advirtió el especialista.

A esto se le suma la escandalosa disminución de las reservas internacionales del país, a pesar de la renta petrolera: de tener 45 mil millones de dólares pasó a apenas seis mil millones, lo que representa una contracción de casi 110% en el volumen. Por el contrario, a Arabia Saudita el boom petrolero le significó, en promedio, una consolidación de 15 mil por ciento en sus reservas internacionales.

“Si en junio los precios del barril de petróleo de ajustan a 22 dólares, Venezuela percibirá una cifra cercana a cuatro mil 500 millones de dólares, que no le permitirá hacer los pagos de la nómina del sector público bajo este esquema salarial”, expuso. “Se verán en la obligación de recurrir a la monetización del déficit fiscal y a la producción de dinero inorgánico, lo que fomentará la hiperinflación”.

A su parecer, el régimen de Nicolás Maduro “no aprendió nada de lo ocurrido entre 2013 y 2018”, en cuyo sexenio la economía venezolana perdió dos terceras partes de su tamaño, sin haber sufrido algún conflicto armado o un desastre natural.

(Foto: EFE)



Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.