Los históricos Dodgers de Los Ángeles ya tienen su séptimo título de campeones del Clásico de Otoño, al vencer 3-1 a los Rays de Tampa Bay en el sexto partido de la serie, que disputaron al mejor de siete y que ganaron por 4-2.
La espera de 32 años llegó a su final, al igual que las frustraciones de haber perdido la Serie Mundial en el 2017 y 2018 frente a los Astros de Houston (3-4) y los Medias Rojas de Boston (1-4).
La gran victoria conseguida por los Dodgers confirmó todos los pronósticos de ser el gran favorito, desde que se inició la reducida temporada. Demostró ser el mejor en el diamante y acabar también con la mejor marca.
"Era nuestro gran objetivo, el triunfo que le debíamos a todos nuestros seguidores que tanto nos han dado su apoyo, a pesar de haber sufrido derrotas muy dolorosas. Además, ganar el título en este año tan difícil para todos es algo muy especial", declaró Dave Roberts, manager de los Dodgers.
Muy especial sobre todo al tener que superar los graves problemas que se dieron con los contagios de COVID-19, lo cual forzó a las Grandes Ligas a los aplazamientos de partidos.
Pero, al final como ya ha sucedido con el Hockey sobre Hielo y la NBA, el béisbol de las Grandes Ligas pudo completar la competición y tener a su campeón de la Serie Mundial.
El triunfo en la Gran Carpa fue doble, ya que no solo tiene a un nuevo campeón del Clásico de Otoño, sino que también pudo celebrar la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y la Serie Mundial con un promedio de 11.437 espectadores que se dieron cita en las gradas del Globe Life Field de Arlington, Texas.
Del mismo modo, los Dodgers se unieron a los Lakers al llevar a Los Ángeles el segundo título nacional de un deporte profesional en la misma temporada, convirtiéndose en la capital de los campeones.
El alero estrella LeBron James, que fue la gran figura en la conquista del decimoséptimo título de los Lakers, se convirtió en el mayor fanático y seguidor de los Dodgers a los que siempre apoyó a través de las redes sociales.
Antes que se disputase este martes el sexto encuentro, James mandó todo tipo de mensajes a los jugadores de los Dodgers para recordarles que todavía les quedaba el último esfuerzo, que los llevase al merecido título de campeones.
Pronóstico que se cumplió y que, a pesar de las restricciones sobre reuniones masivas en las calles, las de Los Ángeles tendrán de nuevo presencia de aficionados de los Dodgers que saldrán a celebrar el triunfo que puso fin a 32 años de espera.
No tendrán desfile oficial. Pero, como sucedió con los seguidores de los Lakers, a los que les tocó esperar menos tiempo dado que en el 2010 habían sido campeones con el fallecido Kobe Bryant y el español Pau Gasol, los seguidores de los Dodgers estarán en las calles.
Mientras que, a la espera de lo que pueda deparar la evolución de la pandemia del coronavirus, los Dodgers y los Lakers han sido también los grandes campeones a pesar del COVID-19.