Un homenaje póstumo recibió la periodista Alecia Franco de Ortega, por parte de familiares y amigos, para despedir a esta destacada comunicadora que falleció el 30 de octubre como consecuencia de complicaciones con la COVID-19.
El homenaje consistió en una misa por el eterno descanso de su alma, oficiada por monseñor José Jiménez, acompañado por el padre Miguel Romero, la cual contó con la asistencia musical de un ensamble de la Orquesta Sinfónica de Carabobo, cuyas interpretaciones hizo llorar a los asistentes.
El jardín del Hesperia WTC Valencia fue el escenario escogido para la actividad, y posterior a la misa, el director del hotel, Carlos Oroño, anunció que en lo adelante llevará el nombre de Alecia Ortega.
«Acordamos que este espacio se llame El Jardín de Alecia, un lugar que ella amó, en el hotel que tanto amó y al que tanto le entregó», dijo.
«Nos hace falta tu risa, la manera como se acercaba, esa palabra que a juro animaba, te deseamos que seas feliz y reza por nosotros», dijo monseñor José Francisco Jiménez, quien ofició la misa junto al padre Miguel Romero.
«Creemos en nuestra fe que Dios te ha recibido con los brazos abiertos», añadió el sacerdote en el oficio religioso donde fueron trasladas las cenizas de la comunicadora.
Diego Alejandro Ortega, hijo de la homenajeada, agradeció el apoyo de todos los presentes y de la junta directiva del hotel.
«Despido estas palabras pero no te despido a ti, mamá, porque siempre estarás en mi corazón y en el de cada persona que te conoció», dijo.
Entre lágrimas y con rosas blancas, los presentes dejaron volar globos como un tributo a quien fue en vida una destacada profesional de la comunicación y las relaciones públicas en Carabobo.
¡Hasta siempre Alecia!
Con nota de prensa