Los problemas de suministro eléctrico continúan el martes en Venezuela, más de 24 horas después del primero de los dos apagones que han dejado a oscuras el país, lo que ha llevado al Gobierno de Nicolás Maduro a prorrogar un día más la suspensión de actividades laborales y educativas en el país.
Dos cortes del servicio que el Gobierno de Maduro achaca a actos de sabotaje, el segundo con un incendio provocado en el patio de generación de la central hidroeléctrica del Guri, la más importante del país, persiste en buena parte del territorio venezolano y mantiene paralizado el país.
En Caracas, el comercio y los servicios experimentan una fuerte restricción, y las pocas gasolineras que no han cerrado sus puertas presentan largas filas de vehículos.
De acuerdo con el ministro de Salud, Carlos Alvarado, "no se ha registrado ningún hecho grave que lamentar" en los hospitales, que dijo están provistos de plantas eléctricas para afrontar el segundo apagón masivo en menos de un mes.
Fuera de Caracas el apagón está afectando a la práctica totalidad del país de una u otra forma.
El gobernador de Anzoátegui, Antonio Barreto Sira, dijo a Efe que el servicio eléctrico ha sido restablecido de forma intermitente en algunos de los 21 municipios de ese estado oriental.
"No es un restablecimiento completo (...) se va la electricidad y se va también el agua", dijo, y explicó que se activó un plan de contingencia para garantizar el funcionamiento de los hospitales.
El gobernador Héctor Rodríguez indicó en Twitter que para las 13.30, hora local (17.30 GMT), el fluido estaba siendo restituido en el estado Miranda, en algunas zonas con un avance de hasta 90 % y en otras apenas el 10 %.
La gobernadora de Táchira, Laidy Gómez, dijo a periodistas que en la mayor parte de esa entidad, fronteriza con Colombia, suman 25 horas sin servicio eléctrico.
"Además, tenemos un colapso de servicios públicos, no hay transporte público", dijo, y aseguró que existen sectores en los que tarda hasta tres meses en llegar el agua a las tuberías.
El gobernador de Zulia, Omar Prieto, informó al canal estatal VTV de la activación de un plan de contingencia en esta región rica en petróleo.
También en ese estado se ha puesto en marcha un plan "para garantizar los bienes y la vida" de la población luego de la ola de saqueos que registró ese estado a principios de marzo, en el apagón anterior, cuando cientos de comercios fueron desmantelados y un millar de personas detenidas.
Una fuente del gobierno del estado Nueva Esparta indicó a Efe que desde ayer en esta región isleña se han producido al menos tres apagones que han durado unas seis horas.
La actividad comercial en todos estos estados se vio reducida en algunos casos en 80 % y las tiendas o restaurantes que optaron por abrir sus puertas lo hicieron para recibir pagos en dólares u otras monedas extranjeras.
El jefe del Parlamento, Juan Guaidó, a quien más de 50 países reconocen como presidente encargado, dijo que la explicación que ofreció el Gobierno de Maduro por el masivo apagón no es creíble, al tiempo que recordó que las estaciones eléctricas están bajo resguardo militar.
Este nuevo corte eléctrico se suma al que ya padeció el país el pasado día 7, y por el que entonces el Gobierno de Maduro culpó a Estados Unidos y a la oposición local.
Según el propio mandatario, un "ataque cibernético" desde Estados Unidos a la sala de control del Guri y sabotajes "electromagnéticos" a las líneas de transmisión generaron aquella falla.
Maduro ha guardado silencio desde el suceso, aunque hoy en Twitter se refirió al fallo y aseveró que el chavismo, en el poder desde 1999, derrotará a sus enemigos.