En la morgue de Bello Monte le practicaron las experticias forenses al cuerpo de Manuel Salvador García González (83), para determinar la causa de muerte porque no presentaba lesiones visibles.
García González estaba jubilado del Ipas-Me, vivía en la avenida Fuerzas Armadas de Caracas, fue hallado el pasado lunes sin signos vitales, atado de pies y manos y en el inmueble se observaron señales de robo.
Una vecina se extrañó porque no escuchó la música ni percibió el acostumbrado olor a café que a tempranas horas provenía del apartamento del señor García.
Pasado el rato fue a tocarle la puerta y al no obtener respuesta notificó a unos familiares, quienes acudieron y hallaron el cadáver.
Del apartamento habían desaparecido objetos de valor y dinero. Tampoco estaban las llaves del inmueble (tuvieron que abrir con las llaves de un hijo), ni el suiche de su carro.
En un área de la vivienda estaban embalados, como listos para ser cargados, una máquina portátil de coser y una cocinilla eléctrica.
Funcionarios del Cicpc realizaron una inspección en el inmueble y entrevistaron a vecinos y familiares de la víctima para determinar cómo ingresaron los homicidas.
También analizan una cinta de video captado por las cámaras de seguridad, en la que se observa el ingreso y salida de personas. Un aspecto de la cinta fue grabado en horas de la madrugada, y se observa cuando entran un hombre, una mujer y un niño, que luego salen cargando cosas.
