Hoy día, probablemente contraviniendo a la forma de pensar de mucha gente intolerante y frente al desastre socio-económico que hay en el país, un país que, a pesar de haber tenido durante los últimos quince años la bonanza petrolera más grande de toda su historia, ha literamente decuplicado (!) la deuda pública llevándola desde 28 mil millones de dólares a 250 milmillones de dólares, quiero hacer con espíritu ciudadano un llamado a la paciencia, a esa paciencia que aparentemente…pero solo aparentemente, parece sinónimo de resignación porque mucha gente ha utilizado esos términos en forma indistinta para indicar un estado muy particular. Nada más equivocado. En efecto, mientras “ resignación” es un pasivo y sumiso abandono a seguir luchando, como una tácita conformidad con lo que està sucediendo, yo diría como una renuncia ncondicionada para defender nuestros derechos, la “paciencia”, en cambio es la capacidad de soportación sin alterarse, es la constancia  constructiva con la cual  se  espera que las cosas mejoren, es un valor potencial inmenso que ayuda a superar los problemas y losmales que nos aflijen. Giacomo Leopardi, famoso poeta italiano del siglo XVIII, a la “paciencia” la llamaba la más heroica de las virtudes. Pero ¿porqué hoy estoy invitando a Venezuela a tener paciencia? Porque frente al desastre que existe en este país, desde la economía con una inflación macroscópica que reduce drasticamente el poder adquisitivo de los sueldos hasta una corrupción sin límites en todos los sectores de la vida cotidiana, con una carencia de producción que nos obliga a importar más del 90% de lo que consumimos, con una falta de seguridad simlemente dramática, frente a ese cuadro poco menos que deprimente, tengo la impresión de que exista en la gran mayoría de las personas una sumisa“resignación”, como si lo que está ocurriendo en el pais fuera inevitable  y no tuviera remedio! Y ese sentimiento pasivo y renunciatario desde luego es falso y sumamente negativo.

Hay que tener paciencia” entonces, para no dejarse llevar por ese estado nocivo y perjudicial! “Hayque tener paciencia” para poder tomar conciencia de que todos, con nuestro comportamiento cotidiano, podemos contribuir a mejorar la situación del país. “Hayque tener paciencia” para enfrentar los abusos y atropellos de los cuales somos víctimas, con tenacidad, con una resistencia activa, con empeño, tratando de cambiar lo negativo en positivo. En fin “hayque tener paciencia” porque estoyseguro que con determinación y con espíritu ciudadano, es posible convertir esos propósitos en realidad. Está en juego el futuro de Venezuela…y non es poco!

Desde Italia  –  Paolo Montanari Tigri




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