Tratando de despojarme de todo espíritu de parte y analizando el cuadro político de esta Venezuela chavista con serenidad, yo llego a comprender   –   desde luego nunca a justificar   –    porqué en diciembre del 1998 los venezolanos, así sea con una abstención  del 60% , hayan votado  por el candidato   Chávez. He dicho “nunca a justificar”, porque en mi mente democrática no cabe que se pueda votar por un militar que ha intentado conquistar el poder con  un golpe de estado! La situación del país era sumamente crítica y Venezuela estaba en pleno proceso de descomposición. Una corrupción incontrolable  –  nada que ver con lo que hay ahora –  había invadido, cual metástasis incontenible, todos los sectores de la vida social, la justicia era manipulada por gente de poder, los hospitales eran totalmente ineficaces y  desprovistos hasta de los más elementales insumos, una inflación del 10%  (ahora es del 10.000%!)etc…

Frente a ese cuadro socio político, surge la candidatura de un hombre como  Chávez, pujante, ambicioso, autoritario, ávido de poder pero con  un carisma que le ha permitido conquistar la simpatía (y el voto) de un electorado decepcionado, pero con la esperanza de haber finalmente encontrado a un ductor capaz de levantar el país de ese baratro en el cual lo había hundido una “ partitocracia” corrupta. Ahora bien, desde ese aciago mes de diciembre de 1998 han trascurrido más de veinte años, ha fallecido Chávez, está mandando su gente y gracias a los despropositados aumentos  de los precios del petróleo, han entrado en las cajas del Estado “miles de millones de dólares”, usados  sin discreción y sin condicionamiento de ningún tipo para financiar las seudo revoluciones de Evo Morales,  de Daniel  Ortega, de los Kirchner, de los hermanos Castro. etc. Sin embargo, no por falta de plata sino por analfabetismo político de los mandantes, todos esos problemas, que había en el país, aumentaron en forma exponencial.

Pues bien, frente a ese cuadro poco menos que deprimente, la pregunta brota espontanea: ¿Si despues de casi 21 largos años y a pesar de los enormes recursos habidos, hoy día hay más corrupción que antes, tenemos el índice de inflación más alto del mundo, los hospitales no funcionan, hay carencia como nunca de artículos de primera necesidad, hay delincuencia como nunca, secuestros de persona como nunca, robos y asaltos como nunca, una total falta de seguridad que condiciona la vida de los venezolanos, una de dos: o esas  encuestas del chavismo están vulgarmente manipuladas o…los venezolanos son masoquistas?

Desde Italia –  Paolo Montanari Tigri




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