La unidad y la coherencia son indispensables para lograr la salida del actual régimen gubernamental que asfixia a los venezolanos y a las instituciones democráticas. El oficialismo constantemente genera con artimañas falsos positivos que desencadenan continuas divisiones entre los miembros de la oposición, logrando disminuir la cohesión de la Unidad y aumentando la incoherencia en muchas actuaciones de los opositores.
La oposición ha caído en la trampa de los falsos positivos como estrategia comunicacional del gobierno y sin darse cuenta se hace eco de su maligna intención sin ningún tipo de verificación debilitando cada vez más el sentimiento unitario.
Para llegar a la unidad cohesionados en torno al objetivo principal que tenemos, es indispensable la coherencia de los actores, sean estos dirigentes o dirigidos, si desvariamos y no se actúa conforme a los principios que nos unen estaremos en primer lugar favoreciendo al régimen y fortaleciendo su falso positivo, en segundo lugar, perdiendo la confianza y el respeto indispensable entre nosotros, y por último desprestigiándose, fomentando el desinterés y el desencanto de la sociedad civil con lo cual se aleja cada día más la unidad necesaria para la solución del problema.
El propósito de la unidad está reñido con las incoherencias y los sentimientos perversos de los personalismos que han destruido la cohesión, hay que replantear los principios y compromisos que nos unen y dejar atrás las conductas nocivas que hasta ahora nos mantienen dispersos. Dos de las principales incoherencias que nos alejan de la unidad es el doble discurso y la contradicción entre lo que se dice y como se actúa.
El nuevo proyecto de país que debemos plantearnos tiene que estar enmarcado en los dignos principios de justicia, libertad y solidaridad e igualdad básicos en cualquier sistema democrático para lo cual se requiere el compromiso moral de cohesión y coherencia de todos.
¡Por una Venezuela libre y de los venezolanos…manos a la obra!
@ltizaguirre