Las autoridades chinas han iniciado investigaciones sobre algunas de las personas que se reunieron en las protestas del fin de semana contra las restricciones por el COVID-19, dijeron a Reuters fuentes que estaban en las manifestaciones de Pekín, mientras la policía permanecía en las calles de la ciudad.
Dos manifestantes dijeron a Reuters que las personas que llamaron y se identificaron como policías de Pekín les pidieron que se presentaran en una estación de policía el martes con relatos escritos de sus actividades el domingo por la noche. Un estudiante también dijo que su universidad les preguntó si habían estado en un área donde ocurrió una protesta y que proporcionaran un relato por escrito.
“Todos estamos borrando desesperadamente nuestro historial de chat”, dijo otra persona que presenció la protesta de Pekín y se negó a ser identificada. La persona dijo que la policía preguntó cómo se enteraron de la protesta y cuál fue su motivo para ir.
No estaba claro cómo identificaron las autoridades a las personas a las que querían interrogar sobre su participación en las protestas, y tampoco estaba claro a cuántas de esas personas pretendían interrogar las autoridades.
La Oficina de Seguridad Pública de Pekín no respondió a una solicitud de comentarios. Un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que los derechos y libertades deben ejercerse dentro del marco de la ley.
El descontento latente con las estrictas políticas de prevención de COVID tres años después de la pandemia se encendió en protestas en ciudades a miles de millas de distancia durante el fin de semana.
Desobediencia civil
La mayor ola de desobediencia civil en China continental desde que el presidente Xi Jinping asumió el poder hace una década se produce cuando el número de casos de COVID alcanza niveles récord diarios y gran parte de varias ciudades se enfrentan a nuevos cierres.
Un funcionario de salud dijo que las quejas sobre los controles de COVID se debían principalmente a su implementación inflexible.
«Los problemas destacados por el público no tienen como objetivo la prevención y el control de la epidemia en sí, sino que se centran en simplificar las medidas de prevención y control», dijo Cheng Youquan a los periodistas, y agregó que las autoridades abordarán las preocupaciones urgentes.
Los funcionarios de la potencia económica del sur de Guangdong anunciaron el martes por la noche que permitirían que los contactos cercanos de los casos de COVID se pusieran en cuarentena en el hogar después de que las autoridades sanitarias pidieran medidas más específicas.
El COVID se ha propagado a pesar de que China se aisló en gran medida del mundo y exigió sacrificios significativos de su población para cumplir con las pruebas frecuentes y el aislamiento prolongado.
Los bloqueos han exacerbado una de las desaceleraciones más pronunciadas en el crecimiento que China ha sufrido en décadas, interrumpiendo las cadenas de suministro globales y agitando los mercados financieros.
Las acciones chinas y el yuan subieron debido a que los inversores apostaron a que las señales de descontento civil podrían provocar una relajación de las restricciones y aplaudieron una relajación de las regulaciones sobre la recaudación de fondos de los desarrolladores.
Los planes para aumentar la tasa de vacunación entre los ancianos también ayudaron a mejorar la confianza del mercado.
Exigen levantar el bloqueo
Un video obtenido por Reuters el martes mostró a los manifestantes en la ciudad oriental de Jinan peleándose con la policía en trajes de protección contra materiales peligrosos y cantando «levanten el bloqueo» mientras intentaban atravesar las barricadas. Reuters pudo confirmar la ubicación en el distrito de Lixia de la ciudad a partir de los edificios y el diseño de la carretera.
En Hangzhou, la capital de la provincia oriental de Zhejiang, videos en las redes sociales que Reuters no pudo verificar de forma independiente mostraban a cientos de policías ocupando una gran plaza el lunes por la noche, impidiendo que la gente se congregara.
Un video mostraba a la policía, rodeada por una pequeña multitud de personas con teléfonos inteligentes, haciendo un arresto mientras otros intentaban hacer retroceder a la persona detenida.
La policía de Hangzhou no hizo comentarios de inmediato.
En Shanghai y Beijing, la policía patrullaba áreas donde algunos grupos en el servicio de mensajería Telegram habían sugerido que la gente se reuniera nuevamente. La presencia policial el lunes por la noche aseguró que no se llevaran a cabo reuniones.
«Da mucho miedo», dijo Philip Qin, residente de Beijing, de 22 años, refiriéndose a la gran cantidad de policías en las calles.
Los residentes dijeron que la policía ha estado pidiendo a las personas que pasan por esas áreas sus teléfonos para verificar si tienen redes privadas virtuales (VPN) y la aplicación Telegram, que ha sido utilizada por los manifestantes, dijeron los residentes. Las VPN son ilegales para la mayoría de las personas en China, mientras que la aplicación Telegram está bloqueada en Internet en China.
Algunos manifestantes habían usado aplicaciones de citas para evadir la censura y el escrutinio policial.
La chispa de las protestas fue un incendio la semana pasada en la ciudad occidental de Urumqi que, según las autoridades, mató a 10 personas.
Algunos usuarios de Internet dijeron que las medidas de bloqueo de COVID obstaculizaron el esfuerzo de rescatar a las personas en el edificio en llamas. Los funcionarios han negado eso.
“Fuerzas extranjeras”
Destacados blogueros nacionalistas, como Ren Yi, nieto del líder del Partido Comunista Ren Zhongyi, y Yu Li, que usa el seudónimo de Sima Nan, escribieron que las protestas fueron fomentadas por «fuerzas extranjeras».
«¿Cuál es su propósito? Por un lado, es intensificar los conflictos internos. Por otro lado, es ver si pueden politizar completamente los temas en torno a nuestras políticas de salud y prevención de epidemias», escribió Ren en su blog.
Las autoridades advierten regularmente que las «fuerzas extranjeras» están poniendo en peligro la seguridad nacional y las han acusado de provocar las protestas por la democracia de 2019 en Hong Kong.
Las autoridades dicen que la política COVID ha mantenido el número de muertos en miles, evitando los millones de muertes en otros lugares. Muchos analistas dicen que relajar la política antes de aumentar las tasas de vacunación podría provocar enfermedades y muertes generalizadas, abrumando a los hospitales.
En un editorial que no mencionó las protestas, People’s Daily, el periódico oficial del Partido, instó a los ciudadanos a «implementar inquebrantablemente» las políticas de COVID.
«Cuanto más difícil es, más tienes que apretar los dientes», dijo.
Fuente: Reuters.
