Miles de personas, la mayoría policías, se manifestaron este sábado en Madrid contra una reforma legal impulsada por el Gobierno español que, a juicio de los sindicatos policiales, deja desprotegidos a los agentes.
Con el lema «No a la inseguridad ciudadana» y con un tiempo frío y lluvioso, la marcha de policías nacionales, regionales y locales y de guardias civiles recorrió el centro de la capital de España con gritos contra el Ejecutivo que preside el socialista Pedro Sánchez, banderas españolas, algunas bengalas y grupos de música.
El Gobierno estimó unos 20.000 los asistentes, mientras que los convocantes elevaron la cifra a 150.000 manifestantes.
Nos sentimos más desprotegidos de lo que estábamos anteriormente porque se pierde el principio de autoridad y se merma la capacidad operativa en la calle», denunció, pues «un particular va a poder difundir esas imágenes con el riesgo que va a conllevar» porque «la difusión de nuestras caras en nuestra operativa nos va a marcar tanto a nosotros como a nuestras familias.
Por su parte, la ministra portavoz del Gobierno español, Isabel Rodríguez, defendió que la reforma busca devolver libertades y derechos a la ciudadanía, «protegiendo a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y garantizando el libre ejercicio de su responsabilidad», pues «tendrán seguridad jurídica».
A la protesta asistieron los líderes del conservador Partido Popular, Pablo Casado, principal fuerza de oposición; el ultraderechista Vox, Santiago Abascal; y el liberal Ciudadanos, Inés Arrimadas.