El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol, informó este jueves que Josué Zurita, alias «El Coropo», que era considerado el delincuente más buscado del estado Bolívar (sur, fronterizo con Brasil), murió en un enfrentamiento con las autoridades.
Reverol dio a conocer la información a través de su cuenta en Twitter donde indicó que el antisocial fue ultimado este jueves en el estado Carabobo (norte) por parte de efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
«Se encontraba solicitado por la masacre que ocurrió en un sector minero que dejó 8 personas fallecidas, poseía un prontuario policial con más de 18 homicidios, extorsiones y secuestros», detalló el ministro.
Señaló también que en el momento en que Zurita iba a ser capturado poseía granada fragmentaria que pretendía activar y arrojar a funcionarios. «Al delincuente le fueron incautadas diversas armas largas, cédulas falsas y líneas telefónicas. Los organismos de seguridad continúan las investigaciones para desmantelar el resto de la banda.
En esta zona venezolana, conocida como el Arco Minero del Orinoco y fronteriza con Brasil, se han registrado en los últimos dos años al menos tres matanzas de mineros con un saldo de más de 20 fallecidos.
La rica franja tiene una extensión aproximada de 111.000 kilómetros cuadrados que van desde el territorio de la Guayana Esequiba (oriente) hasta la frontera con Colombia (occidente), dispone de grandes reservas de oro, coltán, diamantes, hierro, bauxita y otros minerales.
El tamaño y la dificultad de acceso y control del vasto entorno selvático complica su control y facilita la minería ilegal y anárquica.
El Gobierno de Nicolás Maduro aprobó hace tres años la conformación del Arco para la explotación de estos yacimientos, algunos de los cuales estaban siendo operados por mafias locales, y desde entonces el Parlamento ha investigado varias masacres a grupos mineros.
