No habrá aumento de salario mínimo. En el Día del Trabajador este fue el anuncio de Nicolás Maduro: La cestaticket subirá a 40 dólares y el bono de guerra a 20 dólares, montos que estarán indexados a la tasa del Banco Central de Venezuela.
Las expectativas de la clase trabajadora se esfumaron, tras escuchar la intervención de Maduro en una concentración en Caracas, pese a las incesantes manifestaciones de maestros, enfermeros, personal de los organismos públicos que exigían un ingreso digno, ajustado a lo que establece la Constitución de la República de Venezuela.
No fue así. Textualmente, Maduro señaló: «Decreto cestaticket a 40 dólares, indexado y bono de guerra de 20 dólares, además del salario que los trabajadores ganan», indicó.
Denominó estas medidas como un plan de resistencia del ingreso mínimo de los venezolanos.
Plan de resistencia del ingreso
«Es un plan de resistencia del ingreso, que nos debe llevar, más temprano que tarde, a la recuperación del salario en las convenciones colectivas. Debemos llegar más temprano que tarde, tengan la seguridad y la confianza», prometió Maduro.
«Vamos paso a paso compañeros, yo quisiera tener los recursos para hacer más, pero al daño y la herida que ha creado el bloqueo se sumó una espantosa corrupción de gente que utilizó sus cargos para robar al país», apuntó.
La agencia EFE recordó, este lunes, que el salario mínimo, que fue aumentado por última vez en marzo del año pasado, se mantendrá en 130 bolívares, que debido a la inflación, se han visto reducidos a poco más de cinco dólares.
Una familia de cinco personas necesita, al menos, 510,88 dólares al mes para sus gastos en alimentación, según el último reporte del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) publicado a principios de abril, referencia ante la falta de cifras oficiales.
