Leidy Jariza Contreras Zambrano, de 37 años, salió de Venezuela a principios de 2018. Llegó a Perú, específicamente a la ciudad de Trujillo, con el propósito de trabajar y buscar una mejor vida. Comenzó a laborar en un bar donde lamentablemente un hombre que la acosaba y ella rechazaba tras insultarla le disparo en el cuello causándole una grave herida a la venezolana.
Estando en la ciudad, buscó trabajo en un bar y fue contratada. Todo parecía estar en orden para Leidy cuando el pasado 23 de junio un sujeto desconocido llegó al establecimiento y la mujer le atendió. Según medios de comunicación peruanos, el hombre varias veces realizó propuestas indecorosas a la venezolana y ésta las rechazaba una y otra vez.
Cansado de tantos “desplantes” por parte de Contreras, el hombre comenzó a insultarla y acto seguido sacó un arma de fuego y sin dudarlo, le disparó en el cuello. La bala tuvo salida a través de la columna.
Con la confusión del momento y mientras la hermana de Leidy y el dueño del local la atendían para llevarla a un centro de salud, el perpetrador salió huyendo del lugar. Aún la policía no captura al bandido.
Los galenos de la clínica a donde fue trasladada la mujer de nacionalidad venezolana indicaron que su estado es de pronóstico reservado, aunque adelantan que si llegara a sobrevivir, no podría volver a caminar.
De acuerdo al abogado entrevistado por el diario La Industria, Eduarvic LaRosa Espinoza, existe una deliberación sobre el tipo de delito que tuvo lugar en días pasados con LeidyContreras.
“Estamos hablando de un delito de tentativa de homicidio. Los jueces están considerando que disparos de la cintura para arriba es un atentado contra la vida, por lo tanto intento de homicidio, toda vez que de lo que se trata no es de causarle un daño menor a la persona, sino de quitarle la vida. De acuerdo al Código Penal, el autor del disparo puede recibir un pena privativa de su libertad que va de los 5 hasta los 14 años de cárcel”, reseñó la página web de Extra, de Perú.
