La Procuraduría de Colombia suspendió por tres meses y abrió una investigación contra el alcalde de la ciudad de Bucaramanga (noreste), Rodolfo Hernández, por golpear al concejal Jhon Claro durante una discusión el pasado miércoles.
«La Procuraduría General de la Nación abrió investigación disciplinaria y suspendió por tres meses al alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, por la presunta agresión física y verbal a un concejal de la ciudad», informó hoy la entidad en un comunicado.
El hecho ocurrió este miércoles cuando el concejal Claro acusó a un hijo del gobernante de estar vinculado con actos de corrupción.
La reunión entre Claro y Hernández, que ha perdido en varias oportunidades los estribos en público, comenzó en una oficina de la Alcaldía de Bucaramanga y fue subiendo de tono hasta que terminó en la agresión física.
Por esto, la Procuraduría ordenó la «suspensión provisional» del alcalde, teniendo en cuenta que desde el año pasado realiza «acciones disciplinarias» en su contra por actos que podrían vulnerar derechos como la dignidad y el buen nombre de la gente que trabajan con él.
«Dentro de la investigación disciplinaria se decretó, además, la práctica de diferentes pruebas, entre ellas la de recibirle declaración juramentada al concejal para que amplíe las circunstancias de tiempo, modo y lugar en las que se presentaron los hechos», agregó la información.
Por su lado, Hernández dijo hoy a periodistas que «felicitaba al procurador» porque mientras en el país hay miles de atracos y robos y no pasa nada, a él le abrieron un proceso rápidamente.
«Nada ni nadie detendrá nuestra decisión de seguir golpeando a la corrupción donde más le duele, que es la financiación de su politiquería para seguir enquistados en el poder. Yo estaré de vuelta en tres meses. Ellos… ¡no volverán!», añadió el alcalde en Twitter.
