Son industrias hermanas. Lo que le pase a una la afectación sobre la otra es una replica exacta. Con el registro de 97% en la caída en el ensamblaje de vehículos desde 2012, las empresas fabricantes de autopartes en el país tienen el mismo indicador negativo al pasar de 104 mil 83 unidades armadas hace cuatro a solo tres mil 150 al cierre de 2016. Colapso es la palabra que mejor define la situación del sector.
Han sido tres años de flujo de caja negativo
A menos de 10% trabajan las compañías afiliadas a la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (Favenpa). Su presidente, José Luis Hernández, alertó que como consecuencia de esta crisis entre 60% a 80% del personal que labora en las plantas se encuentra en sus casas bajo la figura de suspensión laboral.
Han sido tres años de flujo de caja negativo, no solo por la merma en la fabricación de piezas para las firmas ensambladoras de vehículos. El mercado de reposición, integrado por el parque automotor de 4,2 millones de vehículos particulares y de transporte público y de carga, también ha tenido indicadores en rojo con una caída de 56% en promedio desde 2015.
En cuanto a las exportaciones de autopartes, que ha sido una medida de salvamento lanzada y promovida por el Gobierno, tampoco hay cifras positivas. Los bajos niveles se han mantenido en los últimos ocho años y para el cierre de 2016 solo se exportarán alrededor de seis millones de dólares, lo que es igual a 2,31% de lo que el sector lograba colocar en el mercado internacional hasta 2007, con 260 millones anuales.
Las empresas mixtas ensambladoras de vehículos SKD (semi desarmado) Chery y Venirauto, son las que más han producido vehículos en los últimos tres años. Pero esas firmas no compran autopartes venezolanas, aún cuando existe una política automotriz para desarrollar la industri , que establece porcentajes de incorporación de autopartes nacionales a la fabricación de unidades que no se cumplen.
ESTADO SIN CUMPLIR
La falta de materias primas nacionales ha sido determinante para que la producción haya caído a niveles críticos. Las fallas más acentuadas se han dado en el suministro de acero, aluminio y productos petroquímicos fabricados por las empresas del Estado.
Hace siete meses que no se recibe ningún tipo de despacho de acero, esto significa que el sector solo ha recibido dos mil 441 toneladas métricas (TM) que es 3% del requerimiento para funcionar con normalidad; de aluminio nacional se ha recibido 43% (506 TM) de lo que se necesita, y 57% (558 TM) de resinas.
También hay fallas severas con el suministro oportuno de materias primas importadas como consecuencia de las trabas para el acceso a las divisas. “El sector no tiene oportunidad de participar en asignacione del Cencoex, tampoco pudo hacerlo con fluidez en las subastas Sicad, ni Simadi”. Los fabricantes de autopartes y repuestos nacionales han colocado órdenes de divisas en el sistema complementario (DIicom) a diario y solo se ha recibido menos de un millón de dólares este año, cuando en condiciones normales se demandan 400 millones anuales.
Los créditos con los proveedores internacionales se perdieron debido a las solicitudes de liquidaciones de divisas pendientes en de Cencoex y Cadivi. La deuda totaliza 406 millones de dólares, con casi tres años de espera. “requerimos cancelar para recuperar el crédito y lograr nuevos despachos de materias primas importadas”.
MEDIDAS PENDIENTES
47 reuniones y mesas técnicas ha realizado Favenpa con el sector oficial este año: 33 con el Ministerio para Industria y Comercio; siete con el Ministerio para Comercio Exterior e Inversión Internacional, cuatro con el Servicio Autónomo Nacional de Normalización, Calidad, Metrología y Reglamentos Técnicos (Sencamer) y tres con la Siderúrgica del Orinoco (Sidor). Ninguna ha dado resultados. La más reciente fue la semana pasada con el ministro para Industria y Comercio, Carlos Faría, en la que participaron 30 fabricantes de autopartes y repuestos nacionales. Se tocó el tema de la situación del sector y las sugerencias para reactivarlo, “esperamos respuestas favorables a corto plazo”.
Hernández exigió al Ejecutivo el suministro de ocho mil 200 TM/mes de acero, 420 TM/mes de aluminio y 580 TM/mes de petroquímicos nacionales producidos por las empresas del Estado. Caso contrario, definir la oferta real en cantidad y precio por parte de las empresas del Estado. También se debe ejecutar la segunda fase de los recursos aprobados del Fondo Chino, para la importación de materias primas para los siete repuestos nacionales de mayor rotación.
Es urgente la liquidación de los montos pendientes de las subastas 10 y 26 de Sicad de 2014 y la primera y única de 2015, por un total de 114 millones de dólares. Se debe además flexibilizar el mecanismo de importación en bolívares, en los puertos, y permitir, eliminar la dispensa de la licencia de importación de vehículos establecida mediante Resolución publicada el 20 de octubre de 2014, derogar la referida disposición legal o corregirla, para que en lugar de importar vehículos se empleen dichas divisas para adquirir piezas de ensamblaje CKD para fabricar vehículos nacionales a través de las ensambladorasinstaladas en el país.
Hernández pidió mantener la tarifa arancelaria de 40% para la importación de vehículos terminados, establecer el Impuesto al Lujo al ingreso de todos los vehículos que se compren en el exterior, la incorporación de autopartes nacionales para todos los vehículos ensamblados en el país, tanto empresas privadas como empresas mixtas; titularizar o crear cronograma de liquidación de las solicitudes de divisas pendientes de aprobación que totalizan 406 millones de dólares, y asegurar los niveles de energía eléctrica requeridos por las operaciones productivas, y en caso que sea necesario, definir los niveles de energía eléctrica disponibles con planificaciones de corte acordados con el sector industrial.
