En la bahía, las buenas noticias no paran de llegar y la última fue la presencia de Wilmer Flores, quien regresó a un enorme nivel con el madero, después de haberse perdido unos cuantos compromisos por una lesión.
El pasado domingo, el venezolano fue una verdadera piedra en el zapato para Cachorros de Chicago, después de ligar de 3-3 con dos carreras anotadas y tres producidas. Además de sumar el décimo octavo cuadrangular de la campaña.
Dicho estacazo sirvió para igualar su tope personal en las Grandes Ligas, el cual consiguió en el 2017 con el uniforme de los Mets de Nueva York. En aquella campaña, consiguió esta cifra en 110 compromisos, mientras que en este 2021 lo hizo en 121.
Por otra parte, el grandeliga de 30 años está a una impulsada de arribar al medio centenar y cuando consiga la número 50, será su cuarta zafra con esta cantidad de fletadas; manteniendo aún aquellas 59 remolcadas de 2015 como su mejor marca en las Mayores.
Para Flores, este jonrón fue el imparable 90 del viejo circuito. Es decir, de mantener este ritmo arrollador, estará alcanzando su tercera temporada con 100 o más incogibles.
Ahora bien, en el mes de septiembre ostenta promedio de .667 con cuatro inatrapables en un par de encuentros.
Lo hecho hasta ahora por el venezolano, resulta ser muy positivo para el alto mando de los Gigantes, puesto que estamos entrando en la recta final de la campaña y los de la bahía acarician la clasificación a la postemporada y pelean por el Banderín de la división oeste de la Liga Nacional.
Es por ello que, mientras más productivo sea Flores, más oportunidades tendrá de jugar y el mánager Gabe Kapler podrá variar su alineación.
Por lo pronto, Gigantes irá a su primera postemporada desde el año 2016.
Con información Líder.
