Alfredo S. Flores
Las nuevas medidas económicas indican que el Gobierno ha reiterado su necesidad de controlar en lugar de incentivar la producción, sin embargo es probable que el Ejecutivo pronto tenga que pedir ayuda a organismos y empresas que ha atacado en repetidas ocasiones, consideró el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León.
Ante posibles expropiaciones, expresó que en el país los ciudadanos deben conocer la diferencia entre los ruidos y las señales. “Cuando amenazan a una empresa es un ruido, pero cuando la expropian o la cierran es una señal”, explicó.
El economista cuestionó que desde el Gobierno nacional se le atribuya a los consejos comunales la distribución de alimentos, pues asegura que dicha medida no resolverá la situación. Pronosticó que si no se modifica el sistema económico, el país se va a quedar sin productos. Precisó que la situación del país mejoraría si el Gobierno sincera el sistema cambiario, genera confianza en los inversionistas y le hace la guerra a la corrupción.
Durante su disertación ante el gremio de contadores públicos del estado Carabobo en la I Jornada de Actualización Tributaria, destacó la capacidad de los venezolanos para superar períodos de crisis e hizo un llamado a sustituir el temor por la esperanza. Consideró que en tiempos de vicisitud es cuando más necesarios son los profesionales, la innovación y la creatividad.
Lucha política, no jurídica
León hizo referencia a la confrontación de poderes que existe en Venezuela. Manifestó que en el país el campo de batalla no es jurídico sino político. “Es una lucha entre una mayoría opositora y una minoría que aún tiene un apoyo significativo”, dijo.
El especialista indicó que aunque el Tribunal Supremo de Justicia pueda cometer acciones en contra de la Asamblea Nacional consideradas por algunos sectores como ilegítimas, tiene la facultad según la Constitución, para regular al Poder Legislativo y limitar su agenda.
Dijo que en adelante el Ejecutivo podría continuar con el mismo rumbo, tomar medidas racionales escondidas en un discurso populista e ideológico o presionar al Poder Legislativo para que aplique por él las soluciones necesarias para recuperar la economía.
Sobre la situación irregular que se vivió este jueves en la Asamblea Nacional, donde se suspendió la sesión por falta de acuerdo entre las bancadas, dijo que es solo ruido. La señal es que desde el Parlamento están surgiendo soluciones para incentivar la economía.
