Para el cardenal Baltazar Porras la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) es moralmente inaceptable y reprobable desde todo punto de vista, más allá de todas las consideraciones políticas y jurídicas que pueda tener.
Porras dijo que la sentencia resquebraja la convivencia en el país, de allí la necesidad de reclamar de manera sensata el derecho a que se respete lo que corresponde a la ciudadanos para vivir en paz y que no sea solamente la expresión de un grupo.
El arzobispo de Mérida lamentó las agresiones que sufrieron periodistas y trabajadores de la prensa en las inmediaciones del TSJ.
Sostuvo que, con la sentencia judicial repudiada por el hemisferio, se pone de manifiesto la falta de reconocimiento al otro, hecho fundamental para avanzar en conversación alguna.
El diálogo lo calificó como un hecho hueco y recordó la vigencia de la carta del cardenal Parolin, quien indicó que un diálogo exige la honestidad de las partes de querer llegar a un acuerdo.
