Este lunes cuando los bancos abrieron sus puertas en el marco de los siete días de flexibilización de cuarentena por COVID-19, Ligia Vera salió de su vivienda en Valles de González Plaza hasta el Banco de Venezuela, ubicado en la calle Valencia de Naguanagua, con la esperanza de retirar bolívares en efectivo.
Para ella, el efectivo se ha convertido en un bien preciado. Cuando las entidades bancarias están cerradas y se queda sin efectivo, pasa trabajo para comprar comida o artículos de primera necesidad, debido a que su tarjeta de débito tiene meses vencida.
En las oficinas le habilitaron el sistema de pago móvil, pero esto no es una opción para Vera porque no sabe manejar el equipo telefónico y tampoco ve bien. Ante esto, se debate entre pagar pasaje de transporte público o guardar el poco efectivo que consigue para comprar los alimentos.
400 mil bolívares fue la cantidad que dispensaron este lunes en las taquillas del banco, monto que le alcanza a Vera para comprar solo dos productos de la canasta alimentaria. “Es fuerte lo que estamos pasando ahorita, no hay tiempo ni de llorar”, dijo sin titubear desde la acera a las afueras del banco.
Unos metros más atrás en la fila se encontraba Félix Tovar, de 70 años. Su situación es similar a la de Vera: desde hace más de un año su tarjeta de débito está dañada, por lo que debe ingeniárselas para rendir los bolívares en efectivo que retira cuando abren los bancos.
Ha intentado solventar el problema de tarjeta sin tener éxito. El personal de la agencia bancaria le dice que debe solicitar la cita por Internet pero la escena es la misma de siempre: intenta ingresar a la plataforma, se cae el sistema, lo vuelve a intentar, la página no abre y así se le pasan las horas sin avanzar en el proceso. “Hay que estar cazando el día que la página abra. Yo lo que hago es que rindo el efectivo, compro medio cartón de huevo o una harina y evito gastar en pasaje”.
Este lunes, en las agencias del Banco de Venezuela de la Torre Venezuela, centro comercial Guaparo y el centro de Valencia, los usuarios podían retirar 400 mil bolívares por taquilla y eran atendidos sin distinción de número de cédula, hecho que se mantendrá durante toda esta semana.
Pero esto no se repitió en los demás bancos. En el Banco Plaza y Banco Caroní, ambos ubicados en el CC Guaparo no dispensaron efectivo por taquilla, estaba habilitada el área de atención al cliente. El personal indicó que se trata de una orden de la Superintendencia de Instituciones del Sector Bancario (Sudeban).
En el Banco Mercantil y 100% Banco, de la urbanización El Recreo de Valencia, solo ofrecieron los servicios de atención al cliente sin distinción de número de cédula.
Los usuarios que requerían efectivo tenían la opción de retirar 100 mil bolívares por el telecajero del Banco Mercantil; y 50 mil bolívares en efectivo del 100% Banco.
Pese a que la circular de la Sudeban indica que debe garantizarse e incentivar el uso óptimo de los cajeros automáticos, en el Banco Provincial cercano al liceo Pedro Gual de Valencia esto no se cumplió.
José Enrique Rodríguez, cliente de la agencia, denunció que los cajeros automáticos están inhabilitados y la atención al cliente es lenta. “Yo solo vine a cambiar la clave de la tarjeta y tengo que calarme horas de cola por algo que se puede resolver en un cajero”.
Durante el recorrido, el personal de las distintas agencias bancarias informó que en esta semana de flexibilización de la cuarentena, los usuarios serán atendidos de lunes a viernes en un horario de 9:00 de la mañana a 1:00 de la tarde sin distinción de número de cédula.